Un informe publicado el 9 de diciembre de 2015 por el Comité de Inteligencia del Senado reveló que las técnicas utilizadas por la CIA en sus interrogatorios tras los ataques del 11 de septiembre de 2001 fueron “mucho peores” de lo admitido hasta ahora. Estados Unidos ha sido acusado en reiteradas ocasiones de aplicar torturas brutales a presos acusados (en muchos casos sin pruebas) de terrorismo. Existen polémicas fotografías donde se observan métodos como el ahogamiento.