La Autoridad de bomberos del país señala que las condiciones secas han creado combustible dentro de los bosques, lo cual facilita que se desaten y propaguen incendios.

En el Estado australiano Victoria se han dictado esta mañana órdenes de evacuación inmediata como consecuencia de enormes incendios que azotan a toda la región, especialmente al Parque Nacional Grampianos, en donde hasta el miércoles se habían quemado 5.400 hectáreas, tan solo en un día. El siniestro se inició el martes tras la caída de un rayo sobre los bosques secos a causa de la falta de precipitaciones.

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Los residentes de Halls Gap, cerca de la popular ciudad turística de Grampianos, fueron llamados a evacuar la zona dado que los vientos del sur empujaron un incendio hacia esta segunda.

En la región central de Victoria, Macedon Ranges, el sábado en la tarde se alertó de evacuar inmediatamente Bullengarook a causa de un incendio forestal sin control que se movió hacia el norte desde Coffeys Road

Tras un viernes que el controlador de incidentes de Emergency Management Victoria, Mark Gunning, calificara como «extremadamente malo», en tres reuniones de Victoria se advirtió a los lugareños que el incendio había triplicado su tamaño y alcanzaba las 30.000 hectáreas.

Se anunció que el siniestro arderá durante semanas en un terreno accidentado y podría amenazar a ciudades cercanas como Dunkeld y Pomonal. Esta última aún se recupera sede un incendio forestal que causo la destrucción de muchas de sus casas en el mes de febrero del presente.

Los esfuerzos de extinción se han concentrado en consolidar las líneas de contención ante el aumento de las temperaturas previsto para el domingo 22.

Los distritos occidentales y regiones de Mallee, partes del noreste y la península de Mornington, en Victoria, son precisamente sitios donde se identificó un mayor riesgo de grandes incendios, según dio a conocer el pronóstico estacional de incendios forestales para el verano de 2024 publicado en noviembre por el Consejo Nacional de Bomberos y Servicios de Emergencia (AFAC).

Incendios fuera de control: Los límites de la acción humana frente a la poderosa naturaleza

Entre las agravantes están las áreas inaccesibles donde arden los incendios, de acuerdo con declaraciones de Gunning: «Este es un incendio realmente grave», reporta Herald Sun.

“Y en el caso de los incendios de alta energía, como bomberos no podemos hacer nada al respecto; la naturaleza es tan poderosa que realmente nos limitamos a intentar controlarlos en los límites”, manifestó respecto a la acción de los bomberos.

Los aviones de extinción de incendios también tienen limitaciones pues, según informó Gunning, la enorme columna de humo del viernes 20 indicaba que el fuego se estaba intensificando y finalmente se desplazó hasta Melbourne, y el riesgo aumenta considerablemente para las vidas de quienes intentan apagar el fuego desde arriba.

El experto describió la columna de humo «como una gran aspiradora», «impulsada por los vientos superiores y arrastra el fuego», de modo que los camiones en ocasiones deben retirase para salvaguardar sus vidas y e intentar contener la propagación desde la distancia.

La sequía es uno de los principales combustibles para los estos siniestros, y la región lleva más de 18 meses sin recibir precipitaciones. De modo que Gunning advierte posibles escenarios realmente catastróficos, a fin de entender la gravedad de la situación y saber qué esperar de forma realista.

Verano Negro 2019-2020: Lecciones de un siniestro

Como alertan medios locales australianos, los australianos se preparan para un verano que podría revivir la devastación causada durante el Verano Negro de 2019-2020, y que dejara 26 fallecidos, 2.400 hogares destruidos y más de 5.5 millones de hectáreas quemadas en todo Nuevo Gales del Sur.

Los australianos recuerdan con pesar a los héroes que combatieron las llamas, pero también aprendieron lecciones para evitar tragedias similares.

El Rural Fire Service (RFS) aseguró que desde entonces se habían logrado avances significativos en la mejora de la mitigación de incendios, las capacidades de respuesta y la concienciación de la comunidad en todo el estado, de modo que Australia no vuelva a vivir una catástrofe como esa.

El comisionado del Servicio de Bomberos Rurales, Rob Rogers enfatizó en el rol de las personas desde sus rangos de acción, y señaló la importancia de que cada residente y visitante en un área de riesgo tuviera un plan contra incendios forestales. De igual modo convidó a no acudir a dichos espacios y buscar alternativas para disfrutar la temporada estival.

“Vimos un comportamiento del fuego, una destrucción y pérdidas sin precedentes, pero también fuimos testigos de la extraordinaria dedicación de nuestros miembros y del apoyo de personas de toda Australia y del mundo», manifestó Rogers, y agregó: “Sus sacrificios nos recuerdan la importancia del trabajo que hacemos y por qué todos debemos permanecer vigilantes”.

Australia en sí mismo ha vivido de forma simultánea varias catástrofes, de diversas naturales, como incendios, nevadas e inundaciones, de modo que conocen el poder de la naturaleza, así como han testimoniado en su continente los daños irreversibles del cambio climático. Esperemos que esta nueva oleada de incendios quede como una de tantas, y no como repetición del horrendo Verano Negro.

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