Aumenta a 31 los asesinados en ataque israelí en Nuiserat, Gaza

19 de mayo de 2024 Hora: 09:16

Al menos 31 palestinos murieron este domingo tras un bombardeo aéreo israelí en los campos de refugiados de Nuseirat, Bureij y Jabalia, así como los pueblos y ciudades de Beit Lahia, Rafah y la ciudad de Gaza.

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La mayoría de los decesos, entre ellos mujeres y niños, se reportó en un bombardeo israelí de un edificio residencial en el campamento de refugiados de Nuseirat, en el centro de Gaza.

Según fuentes de los equipos de la Defensa Civil de Gaza hay 20 heridos, muchos de los cuales han sido trasladados al Hospital de los Mártires de Al Aqsa.

A residential square in the Nuseirat camp was destroyed by the occupation aircraft over its residents, children and civilians

The house for the Hassan family https://t.co/rWpcyW0hhU pic.twitter.com/Vzzx8bez3y

— Abdullah Omar�� (@Abdullah_Om3r03)
May 19, 2024

«El equipo de defensa civil pudo recuperar a 31 mártires y 20 heridos de una casa perteneciente a la familia Hassan, que fue atacada por las fuerzas de ocupación israelíes en el campo de Nuseirat», dijo a los periodistas el portavoz de la Defensa Civil Palestina, Mahmoud Bassal.

El funcionario aseguró que los rescatistas seguían buscando personas desaparecidas bajo los escombros.

Más temprano el domingo, el Hospital de los Mártires de Al-Aqsa dijo que había recibido los cuerpos de 20 personas muertas en el ataque que, según testigos, ocurrió alrededor de las 03H00 horal hora local.

Por otra parte, el director del Hospital Kamal Adwan en Beit Lahiya, en el norte de Gaza, dijo que desde este sábado han recibido unos 60 cadáveres, la mayoría de ellos mujeres y niños, debido al bombardeo israelí de una zona residencial superpoblada en Jabalia.

Los familiares palestinos lloraron mientras las víctimas, entre ellas un bebé, eran trasladadas de urgencia al hospital, tras los ataques israelíes y los intensos enfrentamientos en Jabalia.

Abu Nabil, un residente de Jabalia, dijo que «tanques y excavadoras se acercaron a nuestras casas, obligándonos a irnos, después de que golpearon una casa vecina y nos hirieron».