«Nadie es ilegal ante Dios»: La cruzada del papa Francisco por el derecho de los migrantes

Desde Lampedusa hasta la frontera de México, el pontífice desafió la indiferencia mundial y las políticas antimigrantes y la xenofobia de líderes como Donald Trump.

55016597970 3

El papa Francisco saluda a personas en el lado estadounidense de la frontera, durante una corta parada cerca a la frontera internacional con los Estados Unidos el 17 de febrero de 2016, en Ciudad Juárez (México). Foto: EFE


22 de abril de 2025 Hora: 05:11

El Papa Francisco emergió, desde un inicio, como una voz incansable de reclamo y de llamado a la conciencia sobre la realidad que sufren millones de migrantes y refugiados alrededor del mundo.

LEA TAMBIÉN:

Papa Francisco, el argentino que puso a Latinoamérica y a los humildes en el mapa mundial

Su pontificado, marcado por decenas de muertes diarias en el Mediterráneo, la marcha de miles hacia una frontera cada vez más exlcuyente en Estados Unidos y el éxodo de millones de las guerras en Oriente Medio, se definió por un rechazo frontal a la retórica del miedo y la exclusión.

Desde su primer viaje a Lampedusa en 2013 hasta sus últimas horas de vida, Francisco confrontó a gobiernos, desafió a las grandes potencias y recordó a la humanidad que «nadie es ilegal ante Dios»

Su enfrentamiento más emblemático fue contra las políticas del expresidente estadounidense Donald Trump, cuyo plan de deportaciones masivas y construcción del muro fronterizo calificó de «vergüenza» y «acto no cristiano». Incluso en febrero de 2025, horas antes de su muerte, recibió al vicepresidente J.D. Vance para discutir las deportaciones, reafirmando su compromiso hasta el final.

Momentos clave en la defensa de los migrantes

1. Lampedusa, Italia (8 de julio de 2013)

Cuatro meses después de asumir el papado, Francisco viajó a esta isla mediterránea, punto crítico de naufragios de migrantes africanos. Arrojó una corona de flores al mar en memoria de las víctimas y denunció la «globalización de la indiferencia». «¿Quién ha llorado por ellos?», preguntó, criticando la deshumanización de quienes huyen de guerras y pobreza. Esta visita sentó las bases de su discurso: los migrantes no son cifras, sino rostros con historias.

lampedusa
El Papa Francisco llega a la isla de Lampedusa para orar por los migrantes y depositar una corona de flores en el mar por los cientos de personas que han muerto intentando llegar a Europa. Foto: EFE

2. Lesbos, Grecia (16 de abril de 2016)

En plena crisis de refugiados sirios, Francisco visitó el campamento de Moria y llevó en su avión papal a tres familias musulmanas sirias hacia Italia. «Fue una gota en el mar, pero el mar ya no será igual», declaró. Una década después, una de esas familias, establecida en Roma, afirmó que el pontífice «cambió sus vidas» y les dio voz. «Explicó que los migrantes no son una amenaza, sino seres humanos», dijo Nour Essa, sobreviviente siria.

3. Frontera México-Estados Unidos (17 de febrero de 2016)

En Ciudad Juárez, Francisco celebró una misa frente al muro fronterizo, transmitida a miles en El Paso, Texas. «Construyan puentes, no muros», exigió, en un claro mensaje a Trump, quien entonces prometía ampliar la barrera. El entonces candidato republicano replicó: «Es vergonzoso que cuestione mi fe». Pero el Papa insistió: «Quien levanta muros no es cristiano».

papa francisco america5
La migración fue centro de su visita a Ciudad Juárez, México. Foto: EFE

4. Ciudad del Vaticano (24 de octubre de 2021)

Ante el aumento de deportaciones en Europa, Francisco condenó las devoluciones de migrantes a Libia, donde sufren en «campos de concentración». Criticó la criminalización de ONG que rescatan en el Mediterráneo —«la mayor fosa común del mundo»— y pidió «corazones abiertos, no políticas basadas en el miedo».

[Foto: Francisco posa con migrantes en Italia / AP]

5. Último Discurso (12 de febrero de 2025)

Tras el regreso de Trump a la Casa Blanca, Francisco tachó las deportaciones masivas de «vergüenza» en una carta a obispos estadounidenses: «Lastiman la dignidad y terminarán mal». El zar fronterizo Tom Homan contraatacó: «El Vaticano tiene muros; déjennos hacer nuestro trabajo». Pero el Papa mantuvo su postura: «La exclusión es pecaminosa».

2c52e1e3f6cce0b300d7a5030787b11bd12f0775w
Horas antes de su muerte, Francisco recibió al vicepresidente de Estados Unidos, J.D. Vance, a quien le reprochó duramente la política antimigrante de su Administración. Foto: EFE

Un nosotros más grandes que las fronteras

Durante su pontificado, Francisco transformó la migración en un tema central de la Iglesia. Pese a eso, en los 12 años que estuvo frente a la Iglesia Católica, el número de migrantes internacionales creció de 231 a 281 millones, según la ONU.

Frente a esto, el Papa insistió en que migrar es un derecho, pero también lo es «no tener que hacerlo». Promovió soluciones integrales: combatir la pobreza, la violencia y el cambio climático en países de origen.

Sus acciones tuvieron un impacto tangible: acogió a refugiados en el Vaticano, impulsó a parroquias europeas a alojar familias. Sin embargo, su mayor logro fue humanizar el debate. «No son invasores: son madres, niños, víctimas», repetía.

Aunque las políticas antimigrantes persisten, su llamado a la «cultura del encuentro» sigue vigente. Como escribió en Fratelli tutti (2020): «Ningún país puede resolver solo esta crisis. Necesitamos un nosotros más grande que las fronteras».

Autor: teleSUR - NH

Fuente: Agencias