EEUU Decide: Danny Shaw advierte sobre los peligros de la democracia estadounidense

Shaw cuestionó profundamente la supuesta democracia estadounidense, denunciando la hegemonía de los grandes poderes fácticos sobre el proceso electoral.

5 de noviembre de 2024 Hora: 12:06

El profesor e internacionalista, Danny Shaw, analizó el proceso electoral en marcha este martes 5 de noviembre, donde los ciudadanos estadounidenses acuden a las urnas para decidir quién se convertirá en el próximo presidente y vicepresidente del país.

“El sistema de Colegio Electoral, instaurado desde la época de la esclavitud, otorga un poder desigual a los diferentes estados, beneficiando a las áreas conservadoras y restando valor a los votos de las minorías”, señaló el experto.

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A pocos días de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, el profesor de la Universidad Pública de Nueva York, Danny Shaw, ofreció una visión crítica sobre el proceso electoral y la distribución de poder en el país.

Según Shaw, el sistema electoral estadounidense está lejos de ser un modelo de democracia. «Se trata más de una apariencia versus la realidad. Hay grandes intereses mediáticos y de las grandes corporaciones detrás de cada candidato. Ellos son realmente títeres o voceros de esos grandes intereses», afirmó.

«En un estado como Nueva York, el voto republicano está perdido porque se sabe que se va a votar por el candidato demócrata. Esos votos no tienen ningún valor», criticó.

Shaw advirtió que, de ganar nuevamente, Donald Trump representaría «un peligro existencial para el sistema», ya que su impredecibilidad y tendencia a desafiar el statu quo inquieta a la élite gobernante. En contraste, consideró que Kamala Harris sería una «títere fiel» de los intereses corporativos.

Respecto al voto hispano, el profesor afirmó que este se inclinaría mayoritariamente por Harris, ya que las familias latinas están más preocupadas por traer a sus seres queridos de otros países que por las grandes cuestiones geopolíticas.

Finalmente, Shaw cuestionó profundamente la supuesta democracia estadounidense, denunciando la hegemonía de los grandes poderes fácticos sobre el proceso electoral y advirtiendo sobre los riesgos que enfrentaría el sistema si Trump volviera a imponerse.