Mientras el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se pregunta a dónde irán los palestinos, Francia, Gran Bretaña, China, Rusia, Escocia, así como Arabia Saudita, Türkiye y Egipto, se oponen a la ocupación de Estados Unidos a Palestina.

Ante las recientes declaraciones del actual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en torno a la causa palestina con una supuesta reconstrucción del territorio, que incluye tomar el control de la Franja de Gaza, desmantelar las bombas sin detonar, demoler los edificios destruidos por las masacres israelíes y la reubicación forzada de los ciudadanos gazatíes en Egipto y Cisjordania, varios países condenaron la propuesta del político estadounidense, emitida durante una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu.

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El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, criticó hoy la propuesta de Trump sobre el desplazamiento de los palestinos de la Franja de Gaza, así como la idea de que Washington asuma el control del territorio azotado por el genocidio de la ocupación sionista. En tanto, afirmó que la iniciativa del mandatario de EE. UU. no tiene sentido y se preguntó: «¿A dónde irán los palestinos?».

De igual modo, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ratificó la posición de Moscú en torno a la solución de los dos Estados (el palestino y el israelí) como la única base para un arreglo en Medio Oriente. «Esta es la hipótesis en la que se basa la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU y la hipótesis de que es el mayor de los países interesados ​​en este problema. Nos oponemos a ello y pedimos disculpas, y creemos que es la única opción posible», aclaró el alto funcionario ruso. Sin embargo, Trump descartó esta salida en su mensaje.

En representación de Europa, Gran Bretaña y Francia también compartieron sus visiones sobre el particular. El ministro británico de Asuntos Exteriores, David Lammy, aseguró que los palestinos deben asegurarse un futuro en su país. «Siempre hemos tenido claro que creemos que debemos ver a los dos Estados. Debemos ver a los palestinos viviendo y prosperando en su patria, en Gaza y en Cisjordania», señaló en conferencia de prensa celebrada durante una visita a Kiev.

Por su parte, el jefe de la diplomacia gala, Christophe Lemoine, calificó el desplazamiento forzado de la población palestina como una grave violación del derecho internacional, un ataque al espacio aéreo legal de los gazatíes, así como un obstáculo a la solución biestatal y un factor que desestabilizaría las sociedad vecinas de Egipto y Cisjordania, y de toda la región. De hecho, aseveró que el futuro de Gaza no debe estar bajo el control de un tercer país, sino en el marco de un futuro Estado palestino.

Desde el gigante asiático, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Lin Jian, aseguró que su país siempre ha mantenido que el Gobierno palestino es el principio básico para la gobernanza en Gaza luego del conflicto. En ese sentido, aseguró que las autoridades chinas han sido advertidas por la transferencia forzosa del poder a los residentes de Gaza.

Mientras que el Gobierno australiano reiteró su apoyo a la solución biestatal, el ex primer ministro de Escocia, John Swinney, también criticó el plan de Trump sobre el desplazamiento de gazatíes hacia Egipto y Jordania. “Después de meses de matanzas masivas en Gaza y la muerte de más de 40.000 personas, cualquiera que planee destruir sus hogares es inaceptable y vergonzoso”, afirmó Swinney.

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Este martes, Donald Trump aseguró que su plan de dominación estadounidense aseguraría la reurbanización de Gaza, con la demolición de los edificios destruidos por los efectos de los bombardeos de Israel y la creación de «un desarrollo económico que proporcionaría un número ilimitado de empleos y viviendas para la gente de la zona». Asimismo, apuntó la idea de reasentar a los palestinos de la Franja de Gaza en Egipto y Jordania. El presidente de Estados Unidos basa su propuesta en el estado deplorable del enclave palestino, un lugar lleno de derrumbes y escombros, donde «nadie querría vivir», dijo.

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