Aída Bogo de Sarti, miembro fundadora de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, falleció a los 94 años, dejando un legado indomable en la lucha por los derechos humanos en Argentina.

Aída no solo fue una madre que buscaba a su hija, sino una luchadora incansable que, como muchas otras, se convirtió en una de las principales voces del pueblo argentino, enfrentó la dictadura y defendió los derechos universales e innegables con dignidad y coraje.

Aída era madre de Beatriz Sarti, detenida y desaparecida el 17 de mayo de 1977 durante la última dictadura cívico militar, por lo que se unió en ese momento a la activista Azucena Villaflor, en la búsqueda de los hijos secuestrados por el terrorismo de Estado. 

La madre y militante Aída Bogo de Sarti, fue una figura emblemática en la lucha por los derechos humanos en Argentina. Su incansable presencia en Plaza de Mayo, a menudo más centrada en su historia, como muchas madres de desaparecidos, reflejó el dolor transformado en discurso político, cuya valentía al enfrentar la dictadura cívico-militar la convirtió en un símbolo de resistencia.

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Como madre de Beatriz, Aída se unió a las Madres de Plaza de Mayo para exigir justicia, visibilizando el dolor de las miles de familias afectadas por la represión. Su incansable lucha no solo fue por encontrar a su hija, sino también por la memoria y los derechos de todos los desaparecidos.

A lo largo de los años, Aída utilizó su voz y su historia personal para movilizar a la sociedad y nunca dejó de exigir respuestas. Su compromiso con la causa, incluso al organizar el Archivo de la Línea Fundadora de las Madres, consolidó su legado como defensora de la justicia.

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