El 60 por ciento de los encuestados piensa que Morales no debería centrarse en una nueva candidatura presidencial.

El presidente de Bolivia, Luis Arce, y un grupo de ministros y viceministros esperaron por más de una hora este viernes al exmandatario Evo Morales, para iniciar el diálogo convocado la noche del jueves, ante lo cual la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, afirmó que el hecho es una muestra de su falta de vocación de conversar y de razones para defender sus aspiraciones de poder.

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Arce estuvo acompañado por los ministros Prada, Edmundo Novillo, de Defensa, Alejandro Gallardo, de Hidrocarburos y de Planificación, así como por los viceministros Álvaro Ruiz, de Autonomías, Juan Villca y de Política Tributaria, Jhonny Morales. Aguardaron a Morales desde las 18h00 hasta las 19h21.

“Queda claro que Evo nunca quiso el diálogo y que su supuesta preocupación por temas económicos solamente fue un pretexto para seguir avanzando en sus objetivos políticos personales. No tiene argumentos para sustentar sus ambiciones de poder y por eso es que no se presentó hoy en el Ministerio de Educación”, afirmó Prada en una conferencia de prensa.

Morales confirmó que la marcha que partió de Caracollo llegará a la ciudad de La Paz y entrará desde cuatro puntos, a pesar de que la invitación al diálogo fue pública y un abogado del Ministerio de la Presidencia llegó a Ayo Ayo para intentar entregar la misiva sin resultados.

Prada aconsejó a Morales a no dañar al pueblo paceño que lo apoyó durante 14 años debido a su deseo de mantenerse en el poder, ni afectar negativamente la economía de Bolivia ni poner en peligro la vida de las personas.

“Si realmente le interesara la vida, la economía y democracia en nuestros Estado Plurinacional, usted hubiese estado aquí de cara al pueblo, sentado para dialogar, plantear idea y demandas en una mesa de diálogo. Para nosotros, el pueblo es primero, somos de la cultura de diálogo, qué pena que usted haya olvidado los principios ancestrales de las naciones indígenas originarias”, argumentó.

Además, afirmó que el rechazo a la manifestación de Morales «va creciendo día a día en el pueblo boliviano», como lo demuestra la encuesta publicada por la empresa Ipsos Ciesmori, en la que el 81% de los ciudadanos consultados afirman que el expresidente fomenta la marcha a La Paz por sus intereses personales y quiere ser candidato presidencial nuevamente en las elecciones generales de 2025.

Según la encuesta, el 60 por ciento de los consultados piensa que Morales no debería centrarse en una nueva candidatura presidencial para las elecciones de 2025.

La ministra afirmó que la verdadera voluntad de diálogo no requiere de protocolos ni de burocracia, al reiterar su disposición del Gobierno nacional a encontrar una solución a esta protesta.

“La característica de nuestro Gobierno es el diálogo, para resolver los problemas, dejando atrás intereses personales y anteponiendo intereses colectivos del pueblo boliviano”, insistió.

Prada advirtió que la manifestación «evista» tiene la intención de llegar a La Paz con una ventaja de cuatro puntos. Después, Morales planea declararse en una huelga de hambre, tomar sedes sindicales e iniciar un paro indefinido con el objetivo de aumentar el malestar social y «cortar el mandato del presidente» y volver a imponer la candidatura de Morales.

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