Los organizadores de la marcha denunciarán, una vez más, el nombramiento de Barnier como una negación de la democracia.

Sindicatos y organizaciones estudiantiles, ecologistas y feministas de Francia convocaron a una manifestación el próximo 27 de septiembre contra el autoritarismo del presidente Enmanuel Macron, que marginó a la izquierda, ganadora de las elecciones legislativas, de la tarea de formar Gobierno, la cual encargó al político de derecha Michel Barnier.

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A través de un comunicado, los organizadores de la marcha se refirieron a Barnier como “alguien con un pasado homófobo que solo podrá gobernar con un acuerdo permanente con Marine Le Pen» (líder política de la extrema derecha francesa).

Asimismo, aseguraron que Macron se burló del voto del pueblo y que, además, eligió a una persona que representa a la extrema derecha.

???? Alerte ! Ce mardi 17 septembre, le bureau de l’Assemblée nationale va examiner la recevabilité de la proposition pour engager la procédure de destitution de Macron.

Aux membres du bureau, nous disons : il est sain en démocratie de discuter du coup de force du Président. Voter…

— Mathilde Panot (@MathildePanot) September 13, 2024

El pasado 7 de septiembre, miles de manifestantes respondieron al llamado del Nuevo Frente Popular (NFP) y salieron a las calles de varias ciudades del país para denunciar lo que consideran “un robo electoral”.

La portavoz del Sindicato de Estudiantes, Éléonore Schmitt, explicó que los diferentes gremios que participaron en la marcha pasada harán campaña para exigir un aumento en “los salarios, las pensiones, las condiciones de vida de los estudiantes o incluso contra las discriminaciones, especialmente sexistas y sexuales”.

Por otra parte, el próximo 17 de septiembre un grupo de 12 integrantes de la Asamblea Nacional deberán decidir sobre la admisibilidad del procedimiento de destitución de Emmanuel Macron, iniciado por La Francia Insumisa (LFI).

Si la votación es favorable, el texto deberá ser discutido por todos los diputados, en comisión y luego en el hemiciclo.

En ese sentido, la presidenta del grupo LFI, Mathilde Panot, publicó en X: “Votar en contra de la admisibilidad es oponerse al debate. Está en juego la dignidad del Parlamento”.

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