Los obispos expresaron su rechazo a la propuesta del gobierno de modificar una ley que impide la minería en El Salvador.

La Conferencia Episcopal de El Salvador, que comprende a todos los obispos del país, presentó una declaración respecto a las intenciones gubernamentales de modificar una ley que impide la minería en la nación centroamericana.

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“La vida y la salud no tienen precio”, así se titula esta declaración donde se hacen reflexiones, como que El Salvador es el segundo país con mayor degradación ambiental en todo el continente americano.

Asimismo, sostiene que la minería podría tener serias repercusiones en los escasos recursos hídricos de la nación y, consecuentemente, en la salud y la vida de los salvadoreños.

Por otra parte, indica que “la práctica de cualquier tipo de minería sería en El Salvador gravemente dañina y de consecuencias irreversibles contra la salud y la vida de la población”.

Además, tendría un severo efecto dañino en el medio ambiente, la fauna y la flora, es uno de los pensamientos que la Iglesia Católica hace en su comunicado con el objetivo de impedir que prospere un proyecto que busca revertir la prohibición de la minería en el país, lo cual ya ha sido declarado por el presidente Nayib Bukele.

Durante la semana, varias entidades de la sociedad civil emitieron declaraciones, alertando sobre el severo daño que esta circunstancia causaría en El Salvador.

Alejandro Henríquez, miembro del Movimiento Ecologista expresó: “Una vez deforestado, se le suele incorporar explosivo para degradar la roca, para degradar el volcán; sacan la piedra, la trituran (…) y hay que limpiar la piedra, y eso ocupa metales pesados, sea cianuro, mercurio, y otros”.

“Eso termina metiéndose en los mantos acuíferos, porque se mete en el subsuelo, contamina la tierra y contamina el agua”, añadió.

Los obispos consideran que la riqueza de El Salvador reside en su población, en su comunidad, y que salvaguardar la salud de las personas es más valioso que todo el oro del planeta.

“Debemos buscar caminos de desarrollo económico que beneficien a todos, principalmente a los pobres”, expresan en el comunicado los integrantes de la Iglesia Católica de esta nación.

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