La «agresiva acción del régimen sionista» es «una clara violación del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas».

La República Islámica de Irán acentuó su «legítimo» y «obligado» derecho a protegerse después del ataque de Israel en la madrugada de este sábado contra objetivos militares del país, que provocó la muerte de al menos dos militares.

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“Como han subrayado muchas veces las autoridades competentes de la República Islámica del Irán, basado en el derecho inherente a la legítima defensa, que también se refleja en el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, consideramos legítimo y obligado la defensa contra actos de agresión extranjeros”, expresó en un comunicado el Ministerio de Exteriores.

La institución de Irán subrayó que empleará «todas las capacidades materiales y espirituales de la nación iraní para defender su seguridad y sus intereses vitales».

Asimismo, calificó la “agresiva acción del régimen sionista” como “una clara violación del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas, especialmente del principio de prohibición de la amenaza o el uso de la fuerza contra la integridad territorial y la soberanía nacional de los países”.

Por otra parte, reprochó a Israel por ser el «principal causa de tensión e inseguridad en la región» y apuntó a Estados Unidos y otras naciones occidentales por su intenso respaldo militar y político al Estado judío.

Además, exhortó a las naciones integrantes de la  Organización de Naciones Unidas (ONU) a frenar «el genocidio, la guerra y la agresión contra Gaza y Líbano, y frenar el belicismo del régimen sionista.»

Este sábado, el Ejército de Israel informó «precisos ataques contra objetivos militares» del país como represalia, «por los meses de continuos ataques del régimen de Irán contra el Estado de Israel».

Dos soldados perdieron la vida en el ataque a bases militares en las provincias de Ilam, Juzestán y Teherán, pese a que tanto las autoridades militares como las civiles insistieron en que los bombardeos causaron «daños limitados».

El 1 de octubre, Irán lanzó un ataque con aproximadamente 180 misiles contra Israel como represalia al homicidio del líder del grupo chií libanés Hizbulá, Hasán Nasrala, en Beirut, y del líder de la milicia palestina Hamás, Ismael Haniyeh, en Teherán en julio, ambas organizaciones respaldadas por las autoridades islámicas.

Este hecho constituyó el segundo ataque de Irán hacia Israel, tras haber atacado por primera vez territorio israelí en una serie de bombardeos con drones y misiles en el mes de abril pasado.

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