Israel eliminó a dos altos mandos de los movimientos de resistencia islámica libanés (Hezbolá) y palestino (Hamás), respectivamente, en el contexto de una escalada de agresiones en los territorios ocupados, tras la finalización de la tregua en la Franja de Gaza y del Líbano.

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El asesinato de Muhammad al-Ajlah, nuevo comandante de Hamás designado apenas una semana antes, ocurrió durante un ataque la noche del domingo, en el marco de la Operación Poder y Espada.

Según fuentes oficiales israelíes, al-Ajlah había ocupado el cargo de comandante de una compañía de apoyo de combate en el batallón Shejaiya a lo largo de toda la guerra. De este modo, se convirtió en el quinto comandante del batallón Shejaiya de Hamás en ser eliminado desde el inicio del conflicto en octubre de 2023, y el tercero desde que se reanudaron las operaciones en Gaza.

Posteriormente, en el Líbano, un ataque aéreo israelí acabó con la vida de un combatiente de la unidad de operaciones especiales de Hezbolá en la localidad de Itrun, aunque aún no se ha revelado la identidad del oficial.

Para Hamás, al-Ajlah no fue la única baja reportada, ya que el Ejército israelí también confirmó la eliminación de Hamza Wael Asafá, otro comandante, durante un ataque realizado hace aproximadamente dos semanas en la zona central de Deir al-Balah, en la Franja de Gaza.

Además, se informó que habían perdido contacto con los combatientes que mantenían cautivo a un rehén israelí-estadounidense en la Franja de Gaza, quien era fundamental para las negociaciones entre Tel Aviv, Hamás y Estados Unidos para garantizar el respeto a la tregua.

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