En sus primeras declaraciones a la prensa como candidata, la vicemandataria también se refirió a temas de medular importancia como la migración y el medio ambiente.

La vicepresidenta de los Estados Unidos y actual candidata presidencial del Partido Demócrata, Kamala Harris, en lo que sería su primera entrevista como rol de aspirante al cargo de mandataria, dijo a la prensa estadounidense que no llevará a cabo ninguna modificación en la política de envíos de armas a Israel.

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Sobre el intercambio bélico con Tel Aviv, Harris no mencionó nada más, pero fue suficiente como para dar por sentado que, si resulta electa, seguirán muriendo niños, mujeres, hombres y ancianos en Gaza, donde han sido asesinados más de 40.000 palestinos por la ocupación sionista desde el 7 de octubre a la fecha. No obstante, esquivó esta conversación barajando un posible alto al fuego.

Siguiendo esta línea , añadió que esa nación “tiene el derecho a defenderse”, narrativa utilizada por Occidente cómplice para blanquear esas decenas de miles de asesinatos cometidos durante la genocida «respuesta» israelí tras la Operación Diluvio de Al Aqsa (7 de octubre de 2023) .

En sus primeras declaraciones a la prensa como candidata, la vicemandataria también se refirió a temas de medular importancia como la migración y el medio ambiente.

Más de 50.000 toneladas de armas desde octubre, más de 40.000 asesinados

El pasado lunes, medios de comunicación norteamericanos en un balance de información ofrecieron datos que apuntan que desde el inicio del asedio israelí contra gaza el pasado 7 de octubre de 2023, EE.UU. ha enviado más de 50.000 toneladas de armamentos a Tel Aviv para que continúe su genocidio.

Esto se resume en más de 100 cargamentos vía aérea y marítima que han atravesado el Atlántico desde Washington hacia Tel Aviv.

Los envíos incluyen “vehículos blindados, municiones, equipos de protección personal y equipos médicos».

Cada una de esas armas han provocado la muerte más de 40.400 palestinos, de ellos, la mayoría mujeres y niños. Esto, sin contabilizar las víctimas que se encuentran bajo los escombros que, de acuerdo con los informes de las autoridades gazaties, se contabilizan en miles.

A pesar de su evidente complicidad con Tel Aviv, la Casa Blanca se ha negado a reconocer su involucración en el conflicto israelo-gazatí, y según expertos, se han camuflado en solicitudes de alto el fuego por el presidente Joseph Biden y su gabinete.

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