Los gobiernos de Venezuela, México, Cuba, Honduras, Colombia, entre otros, denunciaron y condenaron el intento de golpe de Estado.

Presidentes y personalidades de distintos países reaccionan este miércoles ante el intento de golpe de Estado en Bolivia.

El mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro denunció el golpe de Estado contra la democracia boliviana. “En este momento, fuerzas que han traicionado su juramento de lealtad al Estado, han tomado el Palacio Presidencial en La Paz ”, aseveró el presidente venezolano.

Gobierno de Bolivia denuncia intento de golpe de Estado

«Ese es el camino que quieren los fascistas, los extremistas, golpes de Estado, desestabilización, destrucción, caos», acotó el jefe de Estado venezolano.

Por su parte, el canciller del país suramericano, Yván Gil, precisó en su cuenta de X que Venezuela “denuncia y rechaza de la manera más enérgica, la temeraria intentona de Golpe de Estado, en contra del Gobierno electo del Estado Plurinacional de Bolivia presidido por Luis Arce Catacora, ejecutado por algunas unidades militares traidoras en La Paz el día de hoy”.

Mientras, la vicepresidenta Delcy Rodríguez también ratificó que Venezuela condena “de manera categórica todo acto fascista y  antidemocrático que pretenda perturbar la paz y alterar el orden del pueblo boliviano”.

Entre tanto, el jefe de Estado mexicano, Andrés Manuel López Obrador, manifestó “la más enérgica condena al intento de golpe de Estado en Bolivia”.

También ofreció “total apoyo y respaldo al presidente Luis Alberto Arce Catacora, auténtica autoridad democrática de ese pueblo y país hermano”.

De igual manera, la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, refirió que “el levantamiento de algunas unidades de las Fuerzas Armadas de Bolivia es un atentado contra la democracia. Condenamos enérgicamente estos  hechos”.

Asimismo, extendió el “apoyo incondicional al presidente Luís Arce y a su pueblo. Nuestro respaldo al posicionamiento del Gobierno de México”.

Pos su parte, la Secretaria de Relaciones Exteriores de México, Alicia Bárcena, expresó “el apoyo incondicional y solidaridad al Presidente constitucional del Estado Plurinacional de Bolivia y a su pueblo. Llamamos a respetar la voluntad popular y el orden democrático. México permanece atento”.

El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, manifestó que su Gobierno repudia «el intento de golpe de Estado en marcha y extendemos toda la solidaridad del Gobierno y pueblo cubano al hermano”.

Por su parte, el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla rechazó “contundentemente esos actos y expresamos nuestra solidaridad al Presidente”.

También en la red social X, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, convocó «de urgencia a los presidentes de los países miembros de la Celac, a condenar el fascismo que hoy atenta contra la democracia en Bolivia y exigir el respeto pleno al poder civil y a la Constitución”.

Desde Colombia, el presidente Gustavo Petro mostró “total rechazo al golpe militar en Bolivia. Invito a todo el pueblo boliviano a la resistencia democrática. América Latina debe unirse a favor de la democracia”.

Además, manifestó que “la embajada de Colombia debe otorgar refugio a los perseguidos. No habrá ninguna relación diplomática de Colombia con la dictadura. Un golpe antidemocrático se enfrenta con la movilización generalizada del pueblo”.

Los diputados de Argentina del bloque Unión por la Patria (UxP) repudiaron “enérgicamente el intento de golpe de Estado sucedido hoy en nuestra hermana República de Bolivia, que está resquebrajando la institucionalidad del vecino país”.

Asimismo, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) denunció a la Comunidad Internacional del riesgo del sistema democrático en Bolivia.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil mediante la red social X también “condenó la tentativa de golpe de estado en Bolivia”.

“La posición de Brasil es clara. Soy un amante de la democracia y quiero que prevalezca en toda América Latina. Condenamos cualquier forma de golpe de Estado en Bolivia y reafirmamos nuestro compromiso con el pueblo y la democracia de nuestro hermano país”, afirmó el presidente Luiz Inácio Lula da Silva.

Mientras, el Gobierno de Nicaragua también condenó el intento de golpe de Estado en Bolivia.

La vicepresidenta Rosario Murillo denunció “las maniobras y movimientos militares que se desarrollan en el centro de la capital boliviana La Paz, en el intento de amedrentar el esfuerzo del pueblo de ese hermano país, de transcender y avanzar en su propio camino”.

De igual manera, el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, condenó “enérgicamente los hechos en desarrollo en Bolivia protagonizados por un sector de sus FFAA, que atentan contra su orden democrático y constitucional”.

Asimismo el intelectual Aníbal Garzón, recordó que “este intento de Golpe de Estado en Bolivia, lo que la Jefa del Comando Sur de EE.UU, Laura Richardson, dijo el año pasado sobre los intereses del imperio por el litio de Bolivia”.

Asimismo, el expresidente de Argentina, Alberto Fernández, ratificó su respaldo al presidente Arce y manifestó que «el levantamiento antidemocrático de algunas unidades del Ejército de Bolivia, solo merecen el más enérgico repudio».

Igualmente, el excandidato a la presidencia de Argentina y exministro de Economía de esa nación, Sergio Massa, repudió el intento de golpe de Estado y aseveró que «la condena debería ser unánime y contundente por parte de todas las fuerzas políticas».

Hasta la sede de la embajada de Bolivia en Venezuela llegaron varios funcionarios y altos cargos del gobierno bolivariano, así como otros diplomáticos de países extranjeros de misión en Venezuela.

El embajador de Bolivia en esa nación, Sebastián Michel declaró a teleSUR que han recibido más de 50 reacciones de países a favor de su país y que los demás de seguro no lo han hecho por cuestiones de horario.

“Queremos vivir en paz (…) siempre con votos, pero nunca botas”, subrayó Michel.

Por su parte, la Red de Intelectuales en Defensa de la Humanidad rechazó los actos en contra del orden constitucional en la nación boliviana y su genuino presidente Luis Arce.

De acuerdo con la organización, tales acciones ignoran la voluntad popular y traen al presente momentos de la historia de la nación andina.

«Las imágenes del asedio militar al Palacio Quemado, sede del gobierno nacional, reviven en la memoria los tristes episodios de aquel 11 de septiembre de 1973 en Chile y otros tantos golpes de estado ejecutados en Nuestramérica, que ponen en alerta a los pueblos del mundo», subrayó.

En ese sentido, exigió que se respete la democracia boliviana y el Gobierno de Luis Arce; la vida del presidente y otros líderes políticos de izquierda en el país y que los responsables sean detenidos y juzgados.

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