“Lo que quiero para mis hijos, lo quiero para mi pueblo”

general omar torrijos

La lucha de Torrijos en relación con la soberanía del Canal de Panamá cobra vigencia en medio de las amenazas del presidente Donald Trump de arrebatarlo a la nación centroamericana.


26 de marzo de 2025 Hora: 14:15

La frase de Omar Torrijos preside la página de la Fundación que a su nombre mantiene el legado histórico del expresidente de Panamá.

Un árbol de Guayacán fue sembrado en noviembre del pasado año en los jardines de la Fundación que lleva el nombre del exmandatario istmeño, donde grupos de solidaridad, cubanos residentes, estudiantes y representantes de organizaciones sociales, mantienen viva la raíz que une las historias de los dos heroicos pueblos de Panamá y Cuba.

Fue cuando Gabriela Rosas, de la Coordinadora Nacional de Solidaridad con Cuba, recordó en particular una visita de Fidel al istmo, en noviembre del año 2000. En aquella ocasión fue directo a la parroquia de San Pablo Apóstol en el barrio de La Locería, y rindió homenaje en el lugar donde reposan los restos del general Torrijos.

Del otro lado, en La Habana, también se honra a Torrijos.  Su escultura no podría faltar donde significativas efigies de próceres independentistas, recuerdan al transeúnte la dimensión de la historia latinoamericana.

monumento a torrijos en la habana
El monumento a Torrijos se halla en la habanera Avenida de los Presidentes (también conocida como calle G).

En la Avenida de los Presidentes, está la obra del escultor cubano Andrés González dedicada a Omar Torrijos Herrera, símbolo de su lucha por la devolución del Canal de Panamá. El diseño representa dos elementos agrietados -separados por la vía interoceánica- que culminan en la figura en bronce del expresidente centroamericano.

El monumento fue develado en el año 2009 en la Avenida de los Presidentes, cuando el economista Martin Torrijos, Presidente de Panamá de 2004-2009 e hijo de Omar, realizó una visita oficial a la capital cubana.

Es en esta arteria principal del Vedado habanero -la famosa Calle G o Ave. De los Presidentes – que nace en el Malecón y concluye cerca de la Plaza de la Revolución, es donde entre otros grandes próceres se erigió primero que todas, la efigie del Libertador Simón Bolívar.

monumento a simon bolivar en la habana
Monumento a Bolívar en la calle habanera G, no lejos del monumento al general Torrijos.

Cada monumento refuerza las relaciones indisolubles e históricas entre nuestros pueblos, como sucedió con Panamá, representado por el artífice del Tratado que hizo realidad ese anhelo de la recuperación del canal, emblema de independencia.

Durante la inauguración del monumento, un estrecho colaborador del líder panameño, el Dr. Adolfo Ahumada, recordó que Torrijos desconoció las advertencias de Estados Unidos para evitar el restablecimiento de relaciones de Panamá con Cuba, rotas por anteriores gobiernos tras la expulsión de la Isla de la OEA en 1962.

Entre las amenazas, Torrijos recibió una carta del Secretario de Estado norteamericano en la que señalaba, que el país istmeño debía enfrentar las consecuencias de una reanudación de vínculos con Cuba. Ante ello, el líder decidió soberanamente, señaló Adolfo Ahumada, miembro del equipo negociador de los Tratados Torrijos-Carter, exdirector de la primera Junta Directiva del Canal y actual Miembro del Consejo Nacional de Relaciones Exteriores de Panamá.

torrijos y carter.jpg
Torrijos junto al expresidente estadounidense James Carter.

En medio del incremento del bloqueo para imponer un mayor aislamiento a Cuba, ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas -sesionó de manera extraordinaria y por única vez en Panamá- expresó el 15 de marzo 1973: «Los bloqueos y las presiones deben avergonzar más a quien los ejerce que a quien los recibe. Cada hora de aislamiento que sufre el hermano pueblo de Cuba constituye sesenta minutos de vergüenza hemisférica».

En 1974 restableció las relaciones diplomáticas con Cuba, país que visitó en enero de 1976 oficialmente, y durante la VI Cumbre de Países No Alineados en 1979.

Omar

El octavo de doce hijos, nació el 13 de febrero de 1929 en Santiago, cabecera de la Provincia de Veraguas, considerada la de población más pobre, con un campesinado en precarias condiciones de salud y el mayor índice de analfabetismo. Parte de las experiencias de su infancia marcaron su vida, al acompañar a sus dos padres maestros, hasta los humildes caseríos donde trabajaron.

torrijos

Hizo estudios secundarios en la Escuela Normal de su pueblo natal, respondiendo al interés de sus padres para seguir la tradición magisterial, pero al tercer año ganó una beca para hacer estudios militares en la Academia Militar de San Salvador, en donde sale como Subteniente de Infantería y Bachiller.

Ya era un líder de su grupo. Mostraba interés en el estudio de los problemas sociales y políticos de los pueblos centroamericanos, capacidad organizativa y sentido del compañerismo. Ganan el mote de “Indio Omar”, por su orgullo nacionalista.

Ingresa a la Guardia Nacional de Panamá en 1952 y gradualmente asciende a Teniente Coronel en 1966, tiempo en que le asignan la responsabilidad de la Secretaría Ejecutiva de la Comandancia. Desde aquí, sirve en diferentes misiones especiales que le dieron oportunidad de adquirir conocimientos, relaciones y orientaciones en cuestiones socio-económicas y políticas, hasta convertirse en el oficial de más alta formación académica y técnica dentro de las Fuerzas Armadas panameñas.

Cita la Fundación en su honor:  cuando el Gobierno iniciado el 11 de octubre de 1968 rompió los moldes constitucionales y trató de instaurar un régimen dictatorial, el entonces Teniente Coronel Torrijos Herrera asumió la responsabilidad de la organización y desarrollo del proceso revolucionario para rescatar los derechos constitucionales y restaurar el orden y la seguridad en la nación”. Describe que se nuclea de profesionales, técnicos, intelectuales y otros elementos civiles independientes para formar el nuevo Gobierno. Establece, como sistema de vigorosa autenticidad democrática, la consulta popular directa y el diálogo abierto con todos los sectores de la opinión pública.

Resalta su carisma y sensibilidad por la justicia social, como líder histórico; consolidó un movimiento popular que impulsó transformaciones en Panamá en beneficio de la población, al fundar el Partido Revolucionario Democrático. Fomenta un gobierno acompañado por reformas sociales y agrarias.

omar torrijos en panama
Otra imagen del líder panameño junto al exmandatario de EE.UU., James Carter.

En Panamá, que en la tradición indígena significa abundancia de peces y mariposas, Omar Efraín Torrijos Herrera, trasciende por ser el primer presidente en sentarse “de tú a tú” con Washington. Además de reconquistar el Canal de Panamá, Torrijos posibilitó establecer las relaciones con el entonces presidente estadounidense Jimmy Carter (1977–1981), tranzando así el camino de la soberanía panameña. Paso a la historia como el protagonista principal y el más esforzado combatiente en la lucha por el rescate de los derechos de su pueblo.

Omar Torrijos Herrera (1929-1981) cierra el ciclo de intromisión norteamericana en su tierra natal.

Por casi un siglo

El esfuerzo heroico de 56 000 personas en su mayoría inmigrantes, terminan la construcción en diez años de una obras de ingeniería de leyenda, cuando un buque a vapor estadounidense, “SS Ancón”, se convirtió en la primera embarcación en transitar oficialmente el canal de Panamá el 15 de agosto de 1914, que permite el tránsito de mercancías entre el mar Caribe (Océano Atlántico) y océano Pacífico.

El Canal de Panamá, es también un punto logístico de importancia internacional, donde grandes empresas de transporte concentran aquí sus mercancías, para ser distribuidas por avión o en barcos a través de varios continentes.

Actualmente es un factor clave de la economía de Panamá y de importancia mundial, pero por casi un siglo fue propiedad de Estados Unidos. Recientemente el actual mandatario estadounidense Donald Trump expresó la intención de su gobierno de «recuperar» la vía interoceánica para EE.UU.Ante esta afirmación el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, expresó su rechazo frontal: «El Canal es y seguirá siendo de Panamá y su administración seguirá estando bajo control panameño con respeto a su neutralidad permanente».

A tenor del Tratado Hay-Bunau Varilla, establecido entre Panamá y los Estados Unidos el 18 de noviembre de 1903 -tras la separación de Panamá de Colombia- permite que se tome una franja de 10 millas (unos 16 kilómetros) de ancho sobre el cual pasaría el Canal de Panamá, llamado Zona del Canal. El tratado ofrece a Washington derecho a perpetuidad sobre el canal y soberanía en parte del istmo panameño.

De forma automática, Panamá se convierte en una colonia dependiente de Estados Unidos, son despojados de los ingresos y manejo de la obra funcional a los intereses económicos y militares de Washington.

torrijos en el canal de panama.jpg

La doctrina del Big Stick o del garrote del presidente Theodore Roosevelt, marca la política de Estados Unidos hacia Latinoamérica. Roosevelt adoptó la consigna originada en África occidental, para negociar “habla suavemente y lleva un gran garrote, así llegarás lejos”, estrategia para que Estados Unidos se convirtiera en una potencia hegemónica. Hasta hoy, se esgrime como gendarme del mundo, dirige y sostiene las guerras, intimida con sus misiles, viola los tratados internacionales y los equilibrios geopolíticos existentes.

Desde la apertura, la Zona del Canal fue administrada por la Compañía del Canal de Panamá y financiada por el Departamento de Defensa. Los panameños entraban para trabajar, sin beneficiarse de los privilegios de los estadounidenses, con mayor presencia militar y civil.

Un fenómeno social que da lugar la ocupación, es que da paso a los zoneítas o zonianos. Derivado del inglés “zonians”, constituyen la comunidad de estadounidenses que desplazan el idioma al español. A partir de estas diferencias entre nuevos residentes y panameños, el 9 de enero de 1964 las tropas estadounidenses asesinan a 24 estudiantes panameños que intentan izar la enseña nacional en la Zona del Canal.

Para cerrar el ciclo de intromisión norteamericana en su tierra natal, Torrijos emprendió una campaña que gana fuerte apoyo nacional y externo. Durante varios años, se comunica para establecer un principio de acuerdo con Carter, ratificados por plebiscito en Panamá y por el Senado en Estados Unidos, Torrijos nombra presidente en 1978 al ministro de Educación, Arístides Royo. Así, el 11 de octubre ordena la retirada a los cuarteles de la Guardia Nacional y deja el Gobierno en manos de los civiles.

A pesar del veto de Estados Unidos a la Resolución presentada en la Organización de Naciones Unidas y años de barbaridades, el hecho impulsa a la derogación los acuerdos Hay-Bunau Varilla, tras firmar en 1977 los Tratados Torrijos-Carter.

Para cerrar el ciclo de intromisión norteamericana en su tierra natal, Torrijos emprendió una campaña que gana fuerte apoyo nacional y externo. El acuerdo rubricado en la sede la Organización de Estados Americanos, establece el traspaso gradual de bienes del Canal y del territorio de la Zona a Panamá. A partir del 31 de diciembre de 1999, el canal fue devuelto en propiedad al país istmeño.

torrijos lider.jpg

El presidente de Panamá mostró convicción en el acto, una actitud sin precedentes en un país plagado de administraciones obedientes a Washington. No obstante, Torrijos reconoce que el Tratado quizá no es el mejor para pueblo panameño, “pero en este preciso instante representan la mejor oferta”, tal y como se recoge en ediciones del diario panameño La Estrella de la época.

La justa causa de la recuperación del Canal y la necesidad del desmantelamiento de bases militares yanquis en el istmo, adquiere apoyo político mundial con el ingreso de Panamá en en el Movimiento de Países No Alineados (Mnoal).

Aquellos cubanos en el canal

Es poco conocido que en esa portentosa obra laboraron centenares de cubanos -cuando era un proyecto francés- incluidos varios combatientes de la gesta de la guerra del 68, como el General Antonio Maceo y Grajales y su hermano José.

El Titán de Bronce, también es venerado en la caribeña ciudad de Colón, donde visitaba la tienda de su amigo cubano Antonio Alcalá, donde sostenían apasionados debates políticos por la independencia de Cuba. Durante esos tiempos, Maceo se restablecía de la malaria, cuando recibió a principios de 1888, un mensaje de José Martí en el que afirmaba que llegó la hora de reiniciar la lucha por la independencia de la Patria, ante lo que Maceo ratifica su disposición a contribuir a la “guerra necesaria” que empezaría en 1895.

Aunque los registros estadounidenses no recogen su participación en la construcción del canal, el Antonio Maceo trabajó cuando el proyecto estaba en manos de la Compañía Universal del Canal Interoceánico de Panamá (Francia), creada en 1880 por el empresario Ferdinand Lesseps, “quien conocía a Maceo, al igual que Mr. Boyer, ingeniero principal de la obra”, refiere el periódico cubano Invasor.

Maceo llegó a fines de 1886 a Panamá, laborando en la construcción de casas en la zona de Bas Obispo, aledaño a la ruta fluvial. “De acuerdo con estadísticas francesas de la época, hacia 1886 había, en diversos campamentos canaleros, unos 275 trabajadores de nacionalidad cubana, de los cuales la gran mayoría provenían del Ejército Mambí, como es el caso de Agustín Cebreco, Francisco Carrillo y los hermanos Antonio y José Maceo”.

antonio maceo.jpg
El general independentista cubano Antonio Maceo llegó a Panamá a fines de 1886.

Su hermano José queda como contratista en las obras del canal y Maceo parte hacia Perú, a recaudar fondos para la lucha. Regresa no muy alentado a Panamá pero la compañía constructiva del canal blandeaba un escándalo financiero, que trajo el detenimiento de la obra y la suspensión de pagos. De esta forma se disgrega la comunidad de emigrados cubanos en Panamá.

Otro aporte cubano, fue hecho por el gran del científico Carlos J. Finlay, para combatir devastadoras enfermedad de la Fiebre Amarilla, al haber identificado el vínculo entre el mosquito Aedes aegypti y la enfermedad, al igual que los principios para controlar el contagio y la propagación.

Así consta en la histórica Plaza de Francia en Casco Viejo de la Ciudad de Panamá, una tarja agradece al descubridor cubano que en 188, identificó al agente trasmisor de la fiebre amarilla, padecimiento que junto a la malaria provocaron más de 22 mil muertes durante la administración francesa.

El escrito de la tarja fue hecho por el educador José Daniel Crespo, quien afirmó  sobre el doctor camagüeyano, “no solo marca una época en la historia científica del mundo, sino que es de especial significación para Panamá”.

“Sin este descubrimiento que hizo posible el saneamiento de las zonas tropicales, la gran obra del canal de Panamá no habría podido hacerse sin ingente sacrificio de vidas” (…) “El pueblo y gobierno de Panamá, agradecidos del ilustre sabio cubano, perpetúan su recuerdo”.

Es así como Panamá legitima al científico cubano, cuya hazaña quisieron atribuirles a especialistas estadounidenses.

Todavía es un misterio

Omar Efraín Torrijos Herrera desapareció físicamente en circunstancias todavía sin aclarar, tenía 52 años de edad cuando viajaba en un avión en que se estrelló en el cerro Marta, a unos 90 kilómetros al oeste de la ciudad de Panamá.

Todavía hoy los panameños no logran develar todas las circunstancias en torno al trágico accidente aéreo en Cerro Marta, cuando la aeronave DeHavilland Twin Otter (DHC-6) de la Fuerza Aérea Panameña – fabricado en Canadá- explotó en pleno vuelo en el cerro Marta, en la localidad de Coclé, al noroccidente de Panamá donde lo esperaban los campesinos de la zona.

torrijos condolencia.jpg
El avión en que volaba Torrijos explotó en circunstancias todavía sin aclarar, mas se presume que se trató de un sabotaje preparado por la CIA estadounidense.

“Confesiones de un sicario económico”, es el libro publicado en 2004 por el escritor estadounidense, John Perkins, quien asume que su muerte no es accidental, “fue asesinado por miembros de la política estadounidense quienes se oponían a las negociaciones entre Torrijos y un grupo de empresarios japoneses liderados por Shigeo Pagano, que proponían la construcción de un canal a nivel por Panamá”.

La aeronave desapareció durante condiciones climáticas extremas, pero debido a la limitada cobertura del radar panameño, no fue reportada por perdida por cerca de un día, acotó Perkins.

En una entrevista concedida al diario neoyorquino La Prensa, aseguró que en el “accidente” estuvo la rúbrica de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos. “Su avión explotó por una grabadora con una bomba en ella”. Versiones no confirmadas apuntan que los instrumentos de la nave fueron interferidos desde tierra.

Partieron sobre las 10:34 hora local desde el Aeropuerto de Río Hato y 11 minutos después hicieron una pequeña escala en el Aeropuerto de Penonomé. A las 11:40 hora local viajaron hacia su destino final, pero no arribaron. Antes se escucharon dos explosiones provenientes de la cordillera, dijeron los residentes de Coclesito.

En 2013, el coronel panameño retirado Roberto Díaz Herrera, solicitó al Ministerio Público que iniciara una investigación de oficio sobre la muerte en 1981 del general Omar Torrijos, tras presentar su libro «Omar, de Cuerpo Entero», en el que relata vivencias junto al desaparecido jefe militar.

Díaz Herrera aseguró que familiares de Torrijos recopilaron relatos y versiones que inculpan a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) estadounidense en el plan criminal contra el ex jefe militar que apoyaba a movimientos de liberación en Nicaragua y El Salvador.

torrijos canal 2.jpg
Familiares de Torrijos recopilaron relatos y versiones que inculpan a la CIA en el plan criminal contra el exjefe militar, quien apoyaba a movimientos de liberación en Nicaragua y El Salvador.

Informes suministrados a políticos panameños por el ex presidente dominicano Juan Bosch involucran a la CIA en la conspiración en Panamá. Díaz Herrera estudió el expediente del caso, de más de 900 páginas, entonces se convenció de la necesidad de proseguir las investigaciones.

Dijo que el fuselaje del aparato siniestrado debía ser sometido a nuevas pruebas periciales en los laboratorios, porque habrían quedado marcas de la «explosión de una bomba activada a distancia» antes de que la aeronave cayese a tierra. Tampoco descartó que la muerte del ex presidente ecuatoriano Jaime Roldós, acaecida tres meses antes en Ecuador en mayo de 1981, fuese planeada en circunstancias similares.

En junio de 1980, el avión en el cual volaba el vicepresidente electo de Bolivia, Jaime Paz Zamora, cayó a tierra envuelto en llamas. Se manejó la teoría, aún sin comprobar, de que habían echado azúcar en el tanque de la gasolina. Más tarde la del jefe del Estado Mayor de Perú, general Rafael Hoyos Rubio, en junio de 1981. Torrijos muere poco después de la llegada de Ronald Reagan (1981-1989) a la Casa Blanca.

Julio Yao, asesor del Ministerio de Relaciones Exteriores en los Tratados Torrijos-Carter, escribió una obra, donde insiste en la culpabilidad de Estados Unidos, que “ha demostrado históricamente hacer todo lo necesario para mantener el monopolio o el control sobre la ruta interoceánica”.

En 1986, Moisés Torrijos (fallecido), hermano del general dio a conocer informes que hablan de la “Operación Halcón al Vuelo”, organizada y financiada por la CIA. Igualmente el escolta personal y destacado intelectual José de Jesús Martínez (Chuchú), autor del libro Mi General Torrijos, donde describe: “Recuérdese que ya en 1973, en los días de Watergate, cuando el imperialismo lavó en público algunos de sus trapos sucios, se reveló que Washington quería eliminar a Torrijos. El “accidente” ocurrió en un sitio donde el avión no tenía por qué estar”.

Durante la invasión de Panamá por Estados Unidos, el 20 de diciembre de 1989, desaparecieron los documentos relacionados con el accidente. La mal llamada Operación Causa Justa pretendía capturar y extraditar a Manuel Antonio Noriega y ponerle otro obstáculo a la soberanía nacional de Panamá.

invasion de eeuu a panama.jpg
La documentación sobre el accidente del avión en que viajaba Torrijos desapareció durante la invasión de EE.UU. a Panamá, en diciembre de 1989.

Actualidad

El tema refresca la memoria, cuando las apetencias de dominación del canal interoceánico manifestadas por el actual gobierno de Estados Unidos, estimularon la indignación de la ciudadanía panameña y latinoamericana.

Donald Trump anunció que reclamaría “la devolución” del Canal a Estados Unidos, porque Panamá le cobra peajes “ridículos”, tras lo cual -a no dudar- hay decisiones geoestratégicas, por la creciente presencia de China en la región, con acuerdos de cooperación e inversiones.

“Datos publicados en días recientes por la autoridad del Canal informan que, en los 25 años de gestión panameña, la vía aportó al Tesoro un total de 27 681 millones de dólares. Entre 1913 y 1977, cuando era operado totalmente por EE. UU., las ganancias fueron de 60 millones; entre 1978 y 1988, de unos 704 millones; de 1989 a 1998, aproximadamente 942 millones; y en 1999, último año de administración estadounidense, unos 138 millones”, refiere el periódico Juventud Rebelde.

Autor: teleSUR - Rosa María Fernández