El decreto, enmarcado en el artículo 9 de la Ley 23.696 de Reforma del Estado, fue anticipado la semana pasada.

El presidente Javier Milei oficializó este miércoles la privatización de Aerolíneas Argentinas, a través del Decreto 873/2024, argumentando que la situación financiera de la empresa es insostenible.

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La medida menciona la necesidad de adecuar la gestión de la empresa a los estándares del mercado global, señalando como ejemplos a Air Canadá, Qantas y Lufthansa, que no cuentan con una participación significativa del Estado.

En ella se resalta que, «a pesar del grave resultado económico que arroja la gestión de Aerolíneas Argentinas S.A., sus empleados mantienen importantes beneficios que contribuyen a empeorar la situación descripta».

También agrega que «el Estado Nacional debe destinar los limitados recursos fiscales a atender las necesidades de los que menos tienen, en un contexto en el cual la pobreza alcanza al 52,9 % de la población y la indigencia al 18,1 %».

Recortes que traen cortes

Por otro lado, el Gobierno de Argentina convocó también este miércoles a la licitación nacional e internacional para la venta de las acciones en manos públicas de la empresa Industrias Metalúrgicas Pescarmona (Impsa), la cual desarrolla proyectos hidroeléctricos, parques eólicos, centrales de generación de energía nuclear y equipos de proceso para la industria de los hidrocarburos.

La Secretaría de Coordinación de Producción llamó a licitación al total de las acciones de Impsa, que representan el 84,9 por ciento del capital social, que se dividen en 63,7 por ciento en manos del Estado argentino, a través del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo, y 21,2 por ciento en poder de la provincia de Mendoza.

El resto de las acciones de Impsa está en manos privadas: un 9,8 por ciento en poder del fondo de capital controlado por los acreedores de la compañía y un 5,3 por ciento es propiedad de un fideicomiso controlado por el grupo Pescarmona, fundador de la empresa.

Asimismo, el martes, la presidencia informó el cierre de la compañía Trenes Argentinos Capital Humano (DECAHF), una de las cinco empresas ferroviarias que administra el Estado en el país sudamericano.

Con respecto al tema, el secretario de Transporte de la Nación, Franco Mogetta, explicó durante una conferencia de prensa que la medida se adoptó en el marco de la política de «reducir el déficit y eliminar todos los gastos innecesarios».

La decisión trajo consigo el despido de 1.388 empleados, y forma parte del «plan motosierra» de Milei, quien aseguró que el gobierno prepara además un decreto para eliminar también la Casa de la Moneda.

Esta institución se ocupa de la fabricación de instrumentos de control, documentos de seguridad, diseño y desarrollo de software y procesos de digitalización, y su eliminación traería consigo el despido de casi 1.400 empleados.

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