El ministro Iván Velásquez destacó que la protección de la población civil fue la instrucción dada por el presidente Petro ante los enfrentamientos del ELN y las disidencias de las FARC.

Ante la situación de violencia que atraviesa la región colombiana del Catatumbo, en el noreste del país, el ministro de Defensa Iván Velásquez afirmó el domingo que la prioridad de la Fuerza Pública es preservar las vidas de la población civil.

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«Quiero enviar un saludo especial a nuestros hombres y mujeres de la fuerza pública, su compromiso con la protección de nuestra patria y de cada colombiano en esta región es un ejemplo de valentía y dedicación», enfatizó Velásquez.

El ministro colombiano destacó que la protección de la población civil fue la instrucción dada por el presidente Gustavo Petro ante los enfrentamientos que desde el pasado jueves mantienen el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las FARC, que ya dejan un saldo de al menos 80 muertos y miles de desplazados

Iván Velásquez aseguró que han desplegado tropas por toda la región reforzando su presencia con para garantizar la seguridad y protección de las comunidades y efectivos militares.

Asimismo, el ministro recordó que el Gobierno ha habilitado líneas de apoyo para ayudar a la población en riesgo. «Les pedimos seguir las recomendaciones de nuestras autoridades, y acudir a los puntos establecidos para recibir atención humanitaria y resguardar su integridad».

«El Catatumbo es una región de gente trabajadora y valiente, que ha soportado embates de la criminalidad como ocurre en estos momentos. No vamos a permitir que la violencia se enseñoree en esta región. Llamamos a las comunidades para que en unión con nuestras autoridades podamos salir adelante en esta situación que se nos presenta», agregó el ministro.

La grave crisis humanitaria en el Catatumbo colombiano, provocada por la escalada de violencia entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las FARC, ha dejado al menos 80 muertos y más de 20 heridos, según informes de la Gobernación de Norte de Santander.

La violencia ha forzado a casi cinco mil personas a abandonar sus hogares, muchas de las cuales buscan refugio en Cúcuta, donde han sido atendidas en el Palacio Municipal.

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