El alto al fuego bilateral no se logró prorrogar debido a diferencias en la mesa de diálogos, que actualmente se encuentra suspendida.

El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, hizo un llamado este lunes al Gobierno colombiano y al Ejército de Liberación Nacional (ELN) para que restablezcan el cese al fuego bilateral, que estuvo vigente hasta agosto pasado.

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«Hago un llamado a las partes para que establezcan un nuevo cese al fuego lo antes posible, con un mecanismo sólido de monitoreo y verificación y un alcance suficientemente amplio para mejorar la seguridad de las comunidades afectadas por el conflicto», declaró Guterres.

El secretario general destacó las reuniones extraordinarias entre el Gobierno colombiano y el ELN en Caracas, Venezuela,  que buscan reiniciar las negociaciones. Guterres expresó su optimismo por las intenciones manifestadas por ambas partes de avanzar en el proceso.

«Insto a que consoliden el progreso alcanzado hasta la fecha en la mesa de negociaciones y mantengan la vista puesta en el objetivo global de la paz», añadió.

Negociaciones de paz 

El Gobierno y el ELN reanudaron las negociaciones de paz en noviembre de 2022, y aunque se han llevado a cabo varios ciclos, las conversaciones están actualmente suspendidas. Se prevé que las partes retomen la mesa de diálogos este mes para intentar descongelarlas.

Además, Guterres llamó a las autoridades colombianas a incluir medidas de género en un ‘plan de choque’ destinado a acelerar la implementación del acuerdo de paz firmado con el ELN en 2016. El secretario general consideró que estas medidas fortalecerán el proceso.

Prioridades en el Plan de Implementación

Guterres instó también a tener en cuenta las prioridades del capítulo étnico del acuerdo en la propuesta del Gobierno del presidente Gustavo Petro.

«Este podría ser un paso importante para ampliar la presencia del Estado y llevar los dividendos de la paz… a regiones históricamente marginadas, donde la violencia y la inseguridad persistentes siguen siendo los mayores obstáculos para la implementación del acuerdo», subrayó Guterres.

Colombia está considerando ampliar el plazo de 15 años para la implementación del acuerdo en «cinco u ocho años» adicionales, y propone «medidas extraordinarias y de emergencia» para facilitar el proceso, según informaciones del canciller colombiano  Luis Gilberto Murillo.

El Gobierno de Petro ha iniciado tres procesos de paz diferentes, si bien las negociaciones se encuentran en diferentes fases. La mesa de diálogo con el ELN avanzó durante meses pero quedó suspendida por orden del presidente en respuesta a un atentado contra una base militar.

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