Los demandantes exigen atención urgente y un diálogo efectivo para restaurar la confianza y estabilidad en un sector vital para la conectividad nacional.

Este miércoles, las asociaciones gremiales de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) llevaron a cabo un paro de actividades que impactó significativamente la operatividad en aeropuertos y aeródromos de todo el país. 

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La protesta, que inició a las 08h30, se produjo en respuesta al incumplimiento por parte del Gobierno chileno de acuerdos previamente pactados, provocando una ola de retrasos y cancelaciones en vuelos, particularmente en el Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez de Santiago.

Según datos proporcionados por la Asociación Chilena de Líneas Aéreas (Achila), hasta las 14:00 horas, aproximadamente el 80% de los vuelos nacionales se vio afectado, impactando a cerca de 15.000 pasajeros. “Las cancelaciones de vuelos, sin contar aquellos que han experimentado demoras, han generado serias complicaciones en la conectividad del país”, destacaron desde Achila.

Gonzalo Acuña, presidente de la Asociación de Trabajadores Operativos y Fiscalizadores de la DGAC, expresó su descontento, subrayando que la exclusión de un importante bono de fiscalización en el presupuesto 2025 representa una falta de compromiso del Gobierno hacia los trabajadores. 

“Este bono fue acordado en mayo de 2024 tras prolongadas negociaciones que concluyeron en noviembre de 2023, y su ausencia en el presupuesto actual es un golpe duro para todos los operativos de la DGAC”, afirmó Acuña en declaraciones al medio chileno Radio Bío Bío.

A primera hora de la tarde, la DGAC comunicó que los aeropuertos y aeródromos retornaron a la normalidad, aunque se continúan las gestiones para alcanzar una pronta solución al conflicto. Sin embargo, el impacto en el sector aéreo ha sido evidente y deja en suspenso las futuras negociaciones entre las partes.

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