Durante la Cumbre BRICS-Rusia 2024, Nicolás Maduro aseguró que la era de la hegemonía unipolar ha terminado, dando paso a un nuevo orden global multipolar, donde los países emergentes juegan un papel clave en la construcción de un mundo más equilibrado y justo.

En la Cumbre Brics-Rusia 2024 celebrada en la ciudad de Kazán, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, resaltó el papel clave del grupo de países del Sur Global en la reconfiguración de la geopolítica mundial.

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Durante su intervención, Maduro señaló que el mundo atraviesa un «cambio de época», donde el poder no puede seguir concentrado en un solo bloque o potencia, sino que debe redistribuirse de manera equitativa entre todas las naciones.

«El Brics es el epicentro de este nuevo orden mundial que se está gestando», aseguró Maduro, en referencia a la importancia de la cooperación entre las potencias emergentes para construir un mundo multipolar y multicéntrico.

Según el mandatario, la hegemonía unipolar que Occidente ha tratado de imponer desde la Segunda Guerra Mundial está en declive, y los países del Brics juegan un papel crucial en el nacimiento de un nuevo sistema internacional basado en la igualdad y el respeto mutuo.

Maduro recordó la importancia histórica del Movimiento de Países No Alineados y del G77 en la lucha por la independencia y soberanía de los pueblos del Sur. Sin embargo, afirmó que ahora el BRICS tiene la responsabilidad de llevar adelante ese legado y construir un nuevo paradigma en las relaciones internacionales.

«Este es un momento histórico donde las potencias emergentes, junto con países modestos como Venezuela, América Latina y el Caribe, debemos alzar nuestra voz y reclamar nuestro derecho a un mundo más justo», expresó.

El presidente venezolano también criticó duramente el papel de las Naciones Unidas, afirmando que la organización ha perdido relevancia en la defensa de los derechos de los pueblos del Sur.

Al tiempo que denunció que la ONU no ha sido capaz de detener los crímenes contra los pueblos de Palestina y el Líbano, y cuestionó la falta de acción de la Corte Internacional de Justicia. «Es hora de refundar las Naciones Unidas para que actúen de manera justa e imparcial en la defensa de los más vulnerables», declaró.

Para Maduro, el BRICS representa una alternativa real para contrarrestar la hegemonía occidental y garantizar un nuevo equilibrio de poder en el sistema internacional. «El mundo multipolar que estamos construyendo se basa en la cooperación, la solidaridad y el respeto a la soberanía de las naciones», concluyó.

Por último, el jefe de Estado venezolano subrayó que: «Un nuevo mundo es posible. Creemos que un nuevo mundo ya ha nacido. Los BRICS es el epicentro del nacimiento y el parto histórico de ese nuevo mundo, con valores y principios profundamente humano».

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