Aviones de guerra estadounidenses bombardearon posiciones del autodenominado Estado Islámico al norte de Somalia.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el sábado una serie de bombardeos dirigidos contra el grupo terrorista autodenominado Estado Islámico (EI) en la región montañosa de Golis, al norte de Somalia.

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Este ataque resultó en la muerte de varios miembros de la organización terrorista, sin que hasta el momento se reporten daños a la población civil.

En sus redes sociales, Trump explicó que la operación se centró en eliminar a un alto mando del EI, responsable de planificar ataques, así como a otros terroristas que aquel había reclutado.

Destacó que estos individuos se hallaban ocultos en cuevas, lo que permitió a las fuerzas estadounidenses llevar a cabo un ataque de precisión.

El secretario de Defensa, Pete Hegseth, confirmó que había dado luz verde a la misión, que se realizó en coordinación con el Gobierno Federal de Somalia.

En su comunicado, Hegseth afirmó que la operación no solo logró eliminar a varios miembros del EI, sino que también reforzó la seguridad en la región al reducir la capacidad operativa del grupo.

Trump, en un mensaje que compartió en plataformas como X y Truth Social, se atribuyó el mérito de la operación, indicando que su Administración estuvo tras el objetivo durante años.

Violencia a consecuencia: al menos 48 muertos en ataque estadounidense contra el Estado Islámico en Puntlandia

Criticó a su predecesor, Joe Biden, por no haber actuado con la rapidez necesaria para eliminar a este líder terrorista, cuyo nombre no precisó.

Enfatizó que el mensaje es claro: EE.UU. continuará buscando y eliminando a aquellos que amenazan a sus ciudadanos. Afirmó: “¡Les encontraremos y les mataremos!».

Los ataques aéreos estadounidenses resultaron en la muerte de 48 extremistas del autodenominado Estado Islámico, incluidos cinco comandantes y 12 combatientes extranjeros. Esto ocurrió antes de que las fuerzas de Puntlandia llevaran a cabo una operación de aclarado en las áreas afectadas.

El Gobierno de Puntlandia ha calificado esta operación como un avance importante en la segunda fase de su campaña contra el Estado Islámico, que ha estado atrincherado en las montañas desde 2015, tras su separación de Al Shabaab, la filial somalí de Al Qaeda.

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