El Ministerio de Exteriores de Siria responsabilizó a los Estados Unidos y a Occidente de “apoyar militar y moralmente estos ataques».

Tras el ataque de Israel contra el sur de Beirut, capital del Líbano donde resultaron muertas 12 personas y al menos 66 fueron heridas, os repudios internacionales no se han hecho esperar.

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El Ministerio de Exteriores de Siria condenó este ataque catalogándolo como “crímenes contra la humanidad”.

«El mundo ha sido testigo (..) de una agresión sionista contra los suburbios del sur (de Beirut) en el Líbano, con el resultado de la muerte de muchos y el sufrimiento de (…) civiles (…) Al cometer estos crímenes, la entidad sionista demuestra su brutalidad, su flagrante alejamiento de la humanidad y del derecho internacional», apunta el organismo diplomático sirio.

Asimismo, el ente responsabilizó a los Estados Unidos y a Occidente de “apoyar militar y moralmente estos ataques».

«Estos crímenes se consideran crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, ya que los sionistas no se dieron por satisfechos con la destrucción de la Franja de Gaza», agregó.

Al igual que Siria, la sede diplomática de Irán en suelo libanés se mostró en contra de este tipo de acciones, al tiempo que brindó sus condolencias a los familiares de muertos y heridos.

«Condenamos enérgicamente la locura y la arrogancia israelíes que traspasaron todos los límites en el ataque contra barrios residenciales de los suburbios del sur de Beirut, que mató e hirió a decenas de personas, entre ellas niños y mujeres. Reafirmamos que tales ofensas terroristas no pueden socavar la determinación y la fe del pueblo libanés», subrayó la sede consular en  X.

Por su parte, el Gobierno de España se opuso al ataque, llamando a una disminución en la escalada del conflicto.

«El Gobierno de España condena el bombardeo israelí sobre Beirut y el lanzamiento de cohetes de Hizbulá contra Israel. El cruce de ataques causa víctimas inocentes y amenaza gravemente la estabilidad de la región y la paz y la seguridad internacionales», subrayó la administración española.

Asimismo, señalaron que estos ataques se llevan a cabo «en un contexto regional extremadamente tenso».

«España exige a todas las partes y actores regionales que se abstengan de cualquier acto que pueda desencadenar un estallido de violencia aún mayor, y llama a restablecer la estabilidad y al cumplimiento de todas las resoluciones del Consejo de Seguridad», agregan.

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