La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova, acusó a Ucrania de llevar a cabo un ataque deliberado con drones contra una instalación energética en el sur de Rusia, presuntamente para interrumpir los esfuerzos de paz en curso, incluidos los propuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

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De acuerdo con Zajárova, el ataque resultó en la despresurización de un tanque de petróleo, provocando un incendio que se extendió a una superficie de 1,700 m². La instalación afectada es clave para la transferencia de petróleo desde vagones cisterna ferroviarios al sistema de tuberías del Consorcio del Oleoducto del Caspio.

Recordó que, horas antes de la agresión, los presidentes de Rusia y Estados Unidos habían sostenido una conversación telefónica en la que Donald Trump propuso y Vladimir Putin aceptó una tregua de 30 días para evitar ataques a infraestructuras energéticas.

Según la vocera, aunque el mandatario ruso dio órdenes inmediatas para detener estos ataques, el presidente ucraniano Vladímir Zelenski habría dado instrucciones opuestas, ordenando nuevos ataques en lugar de detenerlos.

La portavoz calificó el ataque como una «provocación premeditada» destinada a socavar las iniciativas de paz, incluidas las propuestas por el presidente estadounidense. Además, acusó al régimen de Kiev de violar los acuerdos alcanzados y de demostrar una incapacidad total para negociar. Zajárova también criticó la supuesta dependencia de Zelenski de tácticas que, según ella, funcionaron bajo la administración Biden, pero que no serían sostenibles bajo la actual administración.

En sus declaraciones, Zajárova denunció que el régimen de Kiev utiliza métodos terroristas contra objetivos civiles, sin consideración por la población pacífica. También responsabilizó a los países que continúan suministrando armas letales a Ucrania, argumentando que estas contribuyen a los actos violentos y amplían la geografía de los crímenes cometidos por el régimen ucraniano.

La portavoz instó a la comunidad internacional a condenar sin reservas estos actos y subrayó que el armamento occidental que llega a Ucrania está alimentando el terrorismo global. Afirmó que estas acciones reflejan la falta de voluntad política del régimen de Kiev para resolver el conflicto por medios diplomáticos y su obsesión por infligir una derrota a Rusia.

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