Bajo el disfraz de «control migratorio», Estados Unidos ha deportado a más de 1100 venezolanos durante los primeros tres meses de 2025, en un mecanismo que expertos denuncian como parte de una estrategia de limpieza étnica del gobierno de Donald Trump. LEA TAMBIÉN: En imágenes: Venezuela se moviliza en defensa de connacionales secuestrados por Bukele […]

Mientras estaban en el avión, los funcionarios del Gobierno les pedían a los hombres que firmaran el documento y no querían.

Este 25 de marzo, se llevará a cabo una marcha en apoyo a los migrantes venezolanos, según Diosdado Cabello, secretario del PSUV, como respuesta al maltrato sufrido por ellos.

Freddy Ñáñez insistió en que el verdadero objetivo de las acciones de la extrema derecha, Estados Unidos y El Salvador es «destruir el proceso bolivariano», incluso si eso implica perjudicar al pueblo venezolano.

Ciudadanos se concentraron en la ciudad de San Salvador, capital del país para reiterar su rechazo total contra la explotación minera, impulsada por el presidente Nayib Bukele y secundada por la Asamblea Legislativa, por el impacto nocivo de dicha actividad sobre el medioambiente.

En El Salvador, Grupo Ortega, una firma de abogados, interpuso una demanda de Habeas Corpus ante la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia en representación de migrantes venezolanos que están secuestrados en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) después de ser expulsados de Estados Unidos (EE.UU.).

La retención de los migrantes se se está violando la Declaración Universal de Derechos Humanos en su artículo 9, que prohíbe las detenciones arbitrarias.

Responsabiliza al mandatario salvadoreño, Nayib Bukele, por la vida y la salud de los venezolanos deportados por EE.UU. y secuestrados en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT). Le exigió respeto a sus derechos humanos.

Toro Noguera, exfuncionario del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, estaría entre los deportados desde Estados Unidos hacia El Salvador en días recientes.

Carmen Carache teme por sus hijos Yeison y Darwin, secuestrados en El Salvador y presos en el CECOT.