«Extendemos nuestra mano amiga en apoyo a la expresidenta», expresó Díaz-Canel luego de que la Casa Blanca prohibiera la entrada a EE.UU. de la exmandataria y quien fuese su ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, acusándolos de supuestos delitos de corrupción durante su mandato, los cuales no fueron probados.