El Sistema Nacional de Gestión de Riesgos y Desastres de Haití informó que lluvias torrenciales caídas entre el sábado y el lunes pasados provocaron al menos 13 muertos, 15 heridos y un desaparecido, además de cuantiosos daños materiales.

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De acuerdo con la agencia, las lluvias -de moderadas a fuertes- fueron provocadas por un frente frío que causó inundaciones de consideración en los departamentos del Noroeste, Grand’Anse, Nippes y Norte.

Además de las víctimas mortales y los lesionados, el clima severo destruyó 501 casas, un total de 16.515 viviendas quedaron inundadas y una veintena de automóviles fueron arrastrados por las aguas.

«Las fuertes lluvias y sus secuelas han dañado varios tramos de carreteras nacionales, departamentales y comunales«, precisó el ente, que detalló que los ríos en el departamento Noroeste han rebosado sus cauces.

Precisamente en esta región se registra el mayor número de fallecidos, con 11 en la comuna de Port de Paix. Se reportan otros 2 decesos en la comuna de Jeremie, en Grand’Anse.

En ambos departamentos se han reportado problemas de salud relacionados con la presencia de aguas estancadas y vectores.

Según reportes de prensa, el primer ministro Alix Didier Fils-Aimé convocó con carácter urgente una reunión con los ministros del Interior y Comunidades Territoriales, Obras Públicas, Transporte y Comunicaciones, Salud Pública, Medio Ambiente y directivos de Protección Civil.

En la reunión se acordó brindar una respuesta rápida y de carácter intersectorial a la emergencia que enfrentan las regiones del norte. Para ello se creó un grupo de trabajo que, entre otras tareas, evaluará los daños, asegurará las áreas más afectadas y brindará asistencia inmediata a las familias necesitadas.

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