El presidente de Estados Unidos (EE.UU.) confirmó este miércoles que su Gobierno impondrá un arancel del 25 por ciento a todos los automóviles que no han sido fabricados en su nación. La medida entrará en vigor a partir de la medianoche del 3 de abril.

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En el contexto de la celebración del llamado «Día de la Liberación» de la economía estadounidense, el mandatario emitió un discurso desde la Casa Blanca, donde realizó oficialmente el anuncio, que ya había sido emitido el pasado 26 de marzo.

«A partir de la medianoche, impondremos un arancel del 25 por ciento a todos los automóviles fabricados en el extranjero», precisó.

Desde el anuncio de la medida, analistas advirtieron que el precio de los productos importados podrían aumentar en EE.UU., entre 3.000 y 12.000 dólares por automóvil, lo cual podría afectar tanto a los anunciantes como a los consumidores.

La medida se suma a otras de tipo proteccionista, que ha anunciado contra sectores como el aluminio y el acero, que buscan renegociar los acuerdos comerciales e incrementar la producción interna.

La decisión tendrá repercusiones significativas en la economía internacional y en las relaciones comerciales de EE.UU. con otros países.

De igual manera, Trump anunció la imposición de otros aranceles «recíprocos» para varios países. A los productos brasileños y de Singapur, el arancel será de un 10 por ciento; a la Unión Europa subirán a 20 por ciento y a China al 34 por ciento.

Igualmente, se aplican tarifas arancelarias al territorio chino de Taiwán (32 por ciento); Suiza (31 por ciento); Sudáfrica (30 por ciento); Camboya (49 por ciento); a Bangladesh (74 por ciento); Pakistán (58 por ciento), a Sri Lanka (88 por ciento), Japón (24 por ciento).

Trump precisó que además se establecerá un arancel mínimo de 10 por ciento a las importaciones.

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