Recep Tayyip Erdogan, presidente de Türkiye, declaró el miércoles 22 de enero como día de duelo nacional en honor a las víctimas del incendio.

Al menos 66 personas perdieron la vida y 51 resultaron heridas en un incendio ocurrido este martes en una estación de esquí en el noroeste de Türkiye.

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El siniestro se desató alrededor de las 3H30 de la madrugada en la zona del restaurante de un hotel de la estación de esquí de Kartalkaya, en Bolu, y rápidamente se propagó por el edificio.

Tras 10 horas de intenso trabajo, los bomberos lograron controlar las llamas con el apoyo de equipos de emergencia de ciudades vecinas, unidades de respuesta a desastres y helicópteros.

Durante un discurso dirigido a la nación tras una reunión del Consejo de Ministros, el mandatario turco anunció que este miércoles todas las banderas serán izadas a media asta hasta la puesta del sol, como muestra de respeto y solidaridad con las familias afectadas por la tragedia.

Por su parte, el ministro del Interior Türkiye, Ali Yerlikaya, confirmó la magnitud de la tragedia, mientras que el ministro de Sanidad, Kemal Memisoglu, informó que de los heridos, 17 ya fueron dados de alta, mientras que uno permanece en cuidados intensivos.

En tanto, el gobernador de Bolu, Abdulaziz Aydin, detalló que los esfuerzos de enfriamiento en las áreas afectadas continúan.

De acuerdo con información del ministro de Justicia, Yilmaz Tunc, el incidente ha generado una investigación encabezada por seis fiscales y un comité de expertos.

En cuanto a las condiciones de seguridad del hotel, el ministro de Cultura y Turismo, Mehmet Nuri Ersoy, aseguró que la instalación contaba con la documentación necesaria, incluyendo un certificado de seguridad contra incendios emitido por el departamento de bomberos.

A pesar de las medidas de seguridad, el edificio de 50 años, recubierto de madera, se vio gravemente afectado por el fuego. Tayyip Erdogan aseguró que los responsables y negligentes tendrán que rendir cuentas ante la ley por la tragedia.

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