Luego de una operación de urgencias, el mandatario Lula da Silva, de 79 años de edad, evoluciona bien y se encuentra extubado y estable.

El vicepresidente de Brasil, Geraldo Alckmin, sustituirá temporalmente al mandatario Lula da Silva en los eventos oficiales previstos para este martes, debido a la hospitalización de salud del presidente.

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Alckmin asumirá el recibimiento del primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, el cual tenía una cita con Lula para sostener una sesión de firmas de actas y acuerdos bilaterales.

Igualmente sustituirá a da Silva en reuniones previstas con el jefe de Gabinete, Rui Costa; y los ministros de Transporte, Renan Filho; y de Salud, Nísia Trindade.

Respecto a la salud de Lula, el médico Roberto Kalil aseguró que el mandatario de 79 años «evoluciona bien, que llegó de la cirugía prácticamente despierto, que fue extubado y se encuentra estable, conversa normalmente, se alimenta y deberá quedar bajo observación en los próximos días».

Los especialistas que operaron a da Silva, ratificaron que el presidente brasileño «no tiene ninguna lesión cerebral», sin embargo, el neurocirujano Marcos Stavale aseguró que aún tiene “las funciones neurológicas preservadas”.

Da Silva fue llevado de urgencia al Hospital Sirio-Libanés el pasado lunes al presentar dolor de cabeza. Luego de los exámenes, se detectó que tenía una «hemorragia intracraneal» producto de la caída que sufrió el pasado mes de octubre, que le impidió asistir a la Cumbre de los BRICS en Kazán.

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