En medio de una reunión con el jefe del Estado Mayor, Valéri Gerásimov, el presidente del gigante eslavo y comandante supremo en jefe de las Fuerzas Armadas de Rusia, Vladímir Putin, anunció la suspensión de las acciones militares en Ucrania con motivo de la Pascua.

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«Nuestra decisión sobre la tregua de Pascua mostrará hasta qué punto es sincera la disposición del régimen de Kiev y su voluntad y capacidad de cumplir los acuerdos, de participar en el proceso de conversaciones de paz encaminadas a eliminar las causas profundas de la crisis ucraniana», señaló el jefe de Estado ruso.

En consecuencia, el Ministerio de Defensa ruso dio instrucciones a todas las unidades militares para que cesaran los combates, desde las 18H00 (hora local) de este sábado hasta el próximo 21 de abril. Asimismo, refirió que la medida toma en cuenta fines humanitarios y se cumplirá «a condición de que el régimen de Kiev la respete mutuamente».

Vladímir Putin pidió a la parte ucraniana que siguiera su ejemplo y declarara también un alto el fuego. A la vez, reiteró su disposición a proseguir las conversaciones de paz y reconoció las aspiraciones de EE.UU., China y los países del BRICS de una solución pacífica de la crisis ucraniana.

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Como parte de su mensaje, el mandatario ruso advirtió que Kiev ha violado más de 100 veces la moratoria sobre los ataques a las infraestructuras energéticas, anunciada el mes pasado. «Al mismo tiempo, nuestras tropas deben estar preparadas para repeler posibles violaciones de la tregua y provocaciones del enemigo, cualquiera de sus acciones agresivas», insistió.

La víspera, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, aseguró que Rusia busca lograr una resolución al conflicto con Ucrania que defiende sus intereses nacionales, y se mantiene abierta al diálogo. Sus declaraciones sucedieron a las del secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, quien hizo énfasis en la posibilidad de que el Gobierno estadounidense deje de negociar un acuerdo de paz entre ambos países europeos.

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