El presidente chino, Xi Jinping, expresó este sábado sus «condolencias» al líder de la junta militar birmana, Min Aung Hlaing, tras el sismo de magnitud 7.7 que sacudió Myanmar en la víspera, dejando más de 1.000 muertos y 2.300 heridos.

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La agencia oficial de noticias china, Xinhua informó que Xi Jinping afirmó sentirse «conmocionado» por este suceso y trasladó sus «más sinceras condolencias a las familias en duelo, a los heridos y a las personas afectadas«.

China y Myanmar «son una comunidad de futuro compartido» y «ambos pueblos disfrutan de una profunda amistad fraternal», aseguró Xi, quien también subrayó que Beijing «está dispuesto a brindar asistencia y a apoyar los esfuerzos para superar el desastre y reconstruir los hogares lo antes posible».

Tras el temblor que se registró a 10 kilómetros de profundidad y con el epicentro a unos 17 kilómetros de la ciudad de Mandalay, las autoridades birmanas declararon el estado de emergencia en las regiones de Sagaing, Mandalay, Magway, Shan, Naipyidó y Bago.

Un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China ya había manifestado el viernes en horas de la noche que Beijing está preparado para «hacer todo lo posible» por Myanmar, país al que el gigante asiático considera como un «vecino amistoso».

En la víspera, China envió un grupo de 82 rescatistas con suministros de emergencias, que se sumarán a decenas de voluntarios chinos que ya han llegado o están de camino a Myanmar.

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