La Fiscalía General del Estado de Chiapas informó que el pasado 10 de mayo, en la sierra de Chicomuselo, se desató un violento enfrentamiento entre sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y civiles inocentes, seguido por la llegada de sicarios del Cártel de Sinaloa dejando un saldo de 11 personas muertas. 

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Entre las víctimas se encuentran dos servidoras de la iglesia católica, según lo confirmó la Diócesis de Tuxtla Gutiérrez, así como una adolescente estudiante que perdió la vida en medio del fuego cruzado entre los grupos criminales.

En un comunicado, la Fiscalía reconoció los homicidios como parte de los conflictos y enfrentamientos que se han venido registrando en la región desde el pasado fin de semana, debido a la disputa de territorios entre cárteles de la droga.

Por otro lado, los habitantes locales han señalado que las víctimas no tenían relación con los grupos criminales en disputa y que entre ellos se encontraba una estudiante del Colegio de Bachilleres del estado de Chiapas.

Para garantizar la seguridad en la zona, un Grupo Interinstitucional liderado por la Fiscalía General del Estado, en colaboración con la Guardia Nacional, el Ejército Mexicano, la Seguridad Pública Estatal, lleva a cabo patrullajes en la región con el objetivo de identificar a los responsables y mantener la paz en la comunidad.