Muchas veces los jóvenes son estigmatizados por distintos medios de comunicación y periodistas militantes de las ideas conservadoras (aunque estos mismos pretendan disfrazarse de “objetivos e independientes”).  Desde el discurso dominante busca asociarse el hecho de ser joven con una etapa de rebeldía inmadura, con una inocencia que los hace permeables a ser engañados, como también al consumo de drogas y alcohol; reiteradamente, por ejemplo, se ha escuchado en los informes del canal Todo Noticias (grupo Clarín) o publicado en las páginas del diario La Nación afirmaciones como “la juventud está perdida”. 

Dicha campaña de difamación y subestimación constante parte de intereses ajenos a una realidad donde los ciudadanos en general y la juventud en particular –portadora de esa sana transgresión tan característica de la edad- , participen activamente en las discusiones políticas. El establishment apuesta a moldear una sociedad atomizada y adormecida, fácilmente manipulable mediante operaciones de prensa y tergiversaciones sistémicas, a través de las cuales las mayorías sean llevadas a defender ambiciones ajenas a las propias. La sola idea de que desde la propia adolescencia la gente sea consciente de sus derechos y luche genuinamente por ellos, les resulta aterradora.

Una juventud critica, despierta, es fundamental para constituir un país donde la justicia social y la igualdad de oportunidades no sean meros eslóganes de campaña o sueños de generaciones pasadas, sino una realidad posible y palpable.

Los jóvenes no son solo el futuro, sino también el ahora, el presente. 

La Unión de Estudiantes Secundarios (Ues)

Valentina Cejas (16), Christian Rodríguez (19), Matilda Vázquez (15) y Nacho Muñoz (16), participan activamente de la Unión de Estudiantes Secundarios (UES) en la localidad bonaerense de Ensenada. Escucharlos es un ejercicio muy grato para aprender de ellos y desmitificar los estereotipos instalados por los medios hegemónicos.

¿Cómo fue que surgió la UES aquí?

La iniciamos para el mes de septiembre, cuando se cumplió un nuevo aniversario de la ”Noche de los Lápices”.

Considerábamos que hacía falta un espacio que les brinde a los estudiantes secundarios la oportunidad de organizarse para reclamar por sus derechos y que constituya un soporte para todos los chicos que quieran formar un centro de estudiantes en su escuela. Así fue que empezamos a armar reuniones y a darle forma. Nuestra primer actividad fue justamente una charla debate sobre lo que sucedió el 16 de septiembre de 1976, la cual se llevó a cabo bajo la consigna de “los jóvenes somos protagonistas”, y en la cual expusieron oradores relacionados a los organismos de derechos humanos, entre ellos el director de DDHH de la municipalidad, un referente del área de DDHH de la provincia de Buenos Aires, y también hablamos algunos de nosotros junto a Nicolás Secco, quien vino en representación de la juventud del Frente Para La Victoria ensenadense.

Posteriormente empezamos a recorrer los colegios, a ver cuáles tenían un centro ya formado y cuáles no. Logramos Fomentar la creación de un espacio estudiantil tanto en la Técnica 1 como en la escuela del Dique (barrio del mencionado municipio).

La ley Nacional de Centros de Estudiantes, promulgada el 1 de agosto del 2013, garantiza el derecho de todo estudiante a organizarse dentro de su unidad educativa, independientemente de si esta es pública o privada. ¿Encontraron alguna resistencia de parte de las autoridades escolares respecto a la posibilidad de que se forme un centro de estudiantes?

Sí, se está armando uno en el colegio Don Bosco, que es privado, y allí la directora intento evitarlo. Pero finalmente se pudo concretar y próximamente se están por llevar a cabo las elecciones.

¿Qué otras actividades han tenido oportunidad de realizar? 

Participamos en la organización del “Maravillosa Música”, que consiste en un concurso de bandas locales. Dicho programa depende del gobierno nacional y está dirigido a músicos jóvenes, chicos que estén estudiando, y a través del cual se les da la oportunidad de presentarse y  dar a conocer lo que hacen. Es una gran herramienta de fomento a la cultura y el arte.

Por otro lado, hicimos una jornada de difusión sobre el voto a los 16 años (aprobado por el congreso argentino durante el 2012, y el cual es de carácter optativo). Allí explicamos bien como se vota, la importancia que tiene participar, y respondimos algunas inquietudes de muchos adolescentes que no estaban al tanto de las cuestiones electorales.

Y recientemente un bingo para conseguir fondos que van a hacer utilizados en distintas actividades que tenemos pautadas.

Puntualmente en su caso ¿Cómo fue que cada uno decidió participar?

Valentina: “Comencé participando en mi colegio, organizándonos con un grupo de chicos para presentarse a las elecciones para el centro de estudiantes, fue una experiencia muy linda porque genero un gran debate y concientización dentro de la escuela; hasta entonces había lista única. Poco tiempo después una profesora me conto sobre la historia de la UES y lo sucedido en la Noche de los lápices, algo que me impacto mucho, y al enterarme que dicho espacio no existía en Ensenada considere que era muy importante poder construirlo acá. La idea es que sirva para que los jóvenes participen en política entendiéndola como la única forma de cambiar la realidad, de transformar las cosas y solucionar aquellas problemáticas que como jóvenes nos aquejan. Es también una manera de demostrar que la juventud está capacitada, formada, que nos interesamos por la comunidad y tenemos mucho para aportar.”

Christian: “Me uní a las UES después de haber creado el centro de estudiantes en mi escuela. La principal motivación para esto es la idea de ayudar al otro, a los pares. Que lo mismo que intentamos conseguir en nuestro colegio, que básicamente son mejores condiciones de estudio, lo busquemos para todo el distrito. En estos pocos meses de militancia nos volvimos muy unidos, disfrutamos mucho haciendo lo que hacemos y no esperamos nada a cambio, nuestro motor son las convicciones.”

Matilda: “Mi primer contacto con la política fue también en el colegio. Me acerque al centro de estudiantes primero para observar que tipo de cosas se hacían, al poco tiempo me convertí en secretaria y después en vicepresidenta; desde allí nos ocupábamos de reclamos relacionados a los problemas edilicios, los problemas sociales. Ahí la conocí a Valentina y fue ella quien me comento que es la UES, empecé a venir a las reuniones y me gusto las cosas que se charlaban y planificaban. Me di cuenta que las mismas dificultades que podíamos tener en nuestra escuela se repetían en otras varias, y que era importante poder apoyarnos entre todos porque entre cuantos más seamos mejor. “

Nacho: “Yo me sume porque es muy importante organizarse para poder ayudar a los demás, partiendo del concepto de que la Patria es el otro, el que tenes al lado. Me gusta colaborar en las escuelas. Por ejemplo,  hay muchos chicos que tienen dificultades económicas y es importante darles una mano, que eso no sea motivo para que terminen dejando el colegio y no puedan egresar”