Al menos 16 personas han muerto y 39 han resultado heridas la madrugada de este sábado luego que un autobús con jóvenes estudiantes a bordo, tuviera un accidente en las inmediaciones de la ciudad de Verona, Italia.

El autobús, según las primeras investigaciones, se empotró a toda velocidad contra uno de los pilares de un puente, en la autopista A-4 a la altura de la localidad de San Martino Buon Albergo, a unos 10 kilómetros al este de la ciudad, antes de incendiarse.

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La mayoría de las víctimas —jóvenes de entre 14 y 18 años que regresaban de Francia a Hungría— quedaron calcinadas después de que el vehículo se incendiara.

La Policía del Estado informó que los muchachos venían de esquiar en Francia, donde transcurrieron sus vacaciones.

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Los bomberos acudieron rápidamente para detener el fuego y ofrecer las labores correspondientes en este tipo de sucesos.

La tragedia ocurrió poco después de la medianoche pero los bomberos y los socorristas tardaron varias horas en definir el número exacto de los muertos, por las llamas que asolaron los cuerpos.

Anteriormente se había informado que se trataba de siete fallecidos y una quincena de desaparecidos.