Ante el inicio este jueves de la nueva temporada de huracanes, varios alcaldes de Puerto Rico coinciden en que ese país no está listo para encarar una nueva emergencia, informan medios locales.

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Los entes municipales aseguran que sus principales tropiezos radican en el desganche de árboles para evitar que el sistema eléctrico colapse, la reparación de vías y puentes y la colocación de generadores en estaciones de bombeo para evitar que falte el agua.

Los ejecutivos municipales destacaron a la prensa que la isla no aprendió las lecciones que dejó el huracán María hace casi seis años, y que el cuadro empeoró para aquellos ayuntamientos en aprietos fiscales, que invirtieron lo poco que tenían en atender la emergencia que causó el huracán Fiona, en septiembre del año pasado, pues aún no reciben reembolsos de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés).

En ese sentido, el alcalde de Yabucoa, Rafael Surillo Ruiz, afirmó: “La mayor lección que aprendimos de María es que no contemos con nadie, más que no sea con los recursos que tenemos nosotros. Si llega alguien de afuera, amén. Gloria a Dios”.

En tanto, la alcaldesa de Loíza, Julia Nazario, declaró que “el sistema está tan frágil que cualquier viento que mueva una rama y toque un cable, nos quedamos sin luz. Está pasando no solo con tormentas. Cada vez que hay vientos, nos quedamos sin luz, y sé de muchos pueblos que se quedan sin luz”.

Otra de las preocupaciones constituye la falta de generadores en las estaciones de bombeo lo que, en caso de que no haya electricidad, impide proveer el servicio de agua potable a los abonados o provoca que el líquido vital usado se desborde.

Por esta línea, el alcalde de Comerío, José “Josian” Santiago, indicó que, en ese pueblo, “todas las comunidades dependen de las estaciones de bombeo porque están en un área alta”. “Eso nos llevó a que, después de María, estuviéramos seis meses sin luz”, enfatizó.

No obstante, aseguran que la dificultad mayor radica en que gastaron todos los recursos para enfrentar al pasado huracán Fiona. El alcalde de San Lorenzo, Jaime Alverio, agregó que municipios como el de él, tienen un déficit y gastaron lo poco que tenían en dicha emergencia que y “no tendrán cómo bandearse ahora”.

“De todos los asuntos, este es el más grave porque no está en las manos de ninguno de nosotros. Los demás (problemas) los podemos trabajar”, afirmó.