Sólo el pasado mes de mayo, se calcula que más de 500 personas podrían haber muerto en distintos ataques del grupo terrorista islámico Boko Haram en Nigeria. No obstante, los asaltos a diversas localidades de Borno llevados a cabo esta semana sumarían al menos 242 personas que también han perdido la vida.

El grupo terrorista ha efectuado una serie de ataques contra diversas localidades, como el perpetrado el pasado 5 de mayo en una ciudad cercana de Gamboru Ngala, con un saldo de 300 personas muertas. A la lista se suman los residentes de las localidades atacadas durante los últimos días, todas en la región de Gwoza, que fueron asediados por terroristas vestidos con ropas militares, según han informado fuentes gubernamentales y vecinos al rotativo nigeriano The Premium Times.

Según el presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, el grupo terrorista ha asesinado a 12 mil personasy ha herido a otras 8 mil en los últimos cinco años.

La Organización de Naciones Unidas por su parte, asegura que cerca de 300 mil personas, más de la mitad de ellos niños, han huido de sus hogares en el noreste de Nigeria desde el estado de emergencia fue impuesto en mayo del año pasado.

Es válido recordar, que desde que la policía acabó en 2009 con el entonces líder de Boko Haram, Mohamed Yusuf, los radicales mantienen una sangrienta campaña que se ha intensificado en los últimos meses. Muestra de ello, ha sido el secuestro de 200 chicas nigerianas el pasado 14 de abril, prometiendo venderlas en el mercado negro, acción con la que han logrado visibilizarse mientras escandaliza al mundo entero.

La organización insurgente fue fundada en el año 2002, y el nombre Boko Haram significa "Está prohibida la enseñanza occidental". Así, promueve una versión del islam que prohíbe a los musulmanes participar de actividades políticas o sociales asociadas a Occidente.