La retención de líquidos es un problema que afecta varias partes del cuerpo, causante principal de la celulitis edematosa, que puede generar dolor corporal, abultamiento del abdomen, bolsas debajo de los ojos, entre otros síntomas.

Consiste en el mal funcionamiento del sistema linfático que se encarga de drenar los fluidos de los órganos a la sangre. Cuando el mismo no realiza esta función algunos líquidos y toxinas permanecen en los tejidos y podrían causar entre dos y tres kilos adicionales.

Causas

Van desde cambios hormonales, herencia genética, exceso de peso o los problemas circulatorios; poco consumo de agua, ingesta insuficiente de proteínas y fibra; sedentarismo, estrés, factores climáticos; entre otros.

Se pone de manifiesto con el hinchamiento de alguna parte del cuerpo, fenómeno conocido como edema, que no está asociado con el exceso de grasa corporal.

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¿Cómo evitarla?

Lo principal es consumir por los menos dos litros de agua por día, además diuréticos natural como el té verde y otras infusiones naturales bajas en sodio.

Disminuir el consumo de sal, en ese sentido se recomienda no ingerir embutidos, quesos, conservas, frutos secos y productos basados en maíz.

Otra alternativa puede ser el consumo de frutas diuréticas como piñas, melones, sandías, perejil, nísperos, berenjenas, calabacines, cebollas, peras, manzanas, apio, jengibre, alcachofas; por mencionar algunas.

Mantener una dieta alta en consumo de proteínas para no reducir la producción de albúmina, encargada de la presión oncótica y necesaria para la distribución correcta de líquidos corporales.

Consumir alimentarios como magnesio, potasio y el ginkgo biloba ayudarán al organismo los fluidos innecesarios.

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