Jordi Pujol, quien fue presidente del Gobierno regional de Cataluña (noreste de España) durante 23 años (1980-2003), y presidente fundador de Convergencia i Unió (CiU), renunció este martes a sus cargos honoríficos en CiU y a sus prerrogativas como expresidente.

Pujol también renunció a sus prerrogativas como expresidente de la Generalitat, el gobierno de Cataluña, tras haber admitido el viernes pasado tener dinero en paraísos fiscales.

El expresidente catalán, de 84 años, admitió haber tenido cuentas sin declarar en el extranjero durante 34 años. Entre los beneficios a los que renunció, destacan más de 86 mil euros al año (115 mil dólares) pensión vitalicia que ganaba por haber sido presidente.

Artur Mas, el actual presidente catalán, admitió que siente "pena, compasión y un dolor muy grande" por la situación de Jordi Pujol, el líder de CiU que en su día le designó como su sucesor al frente de esta formación.