La Organización de las Naciones Unidas (ONU) informó este jueves que al menos 215 mil personas se han marchado de sus hogares en la región de Darfur (oeste de Sudán del Sur), tras la ola de violencia que se ha desatado en esa nación en los últimos tres meses.

De acuerdo a un comunicado presentado por el organismo internacional, el número de desplazados se debe a los ataques de los grupos armados, que en su intento por lograr el poder han sembrado un ambiente de violencia y odio en la región sudanesa.

Más tarde, el coordinador humanitario de Sudán del Sur, Ali Al-Zaâ Ötari y el representante de Darfur ante la ONU, Joseph Mutaboba, hicieron un llamado al Gobierno de ese país a unir esfuerzos para dar fin al conflicto armado que enfrenta esa nación.

Consideraron que la comunidad internacional debe garantizar la protección de los civiles de la región de Darfur y de todas las del mundo. Aplaudieron el apoyo de los países que no promueven la guerra e insistieron en que la situación en Sudán del Sur debe ser solventada a la brevedad posible.

Recalcaron que no debe haber impedimento para que los trabajadores encargados de la asistencia humanitaria lleven la ayuda a los habitantes desasistidos.

Asimismo, recordaron que desde el 2003 miles de personas perdieron la vida y al menos dos millones fueron desplazados de sus hogares por las hostilidades que vivían.

A principios de marzo del 2014, diversas fundaciones adscritas a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), denunciaron que más de 40 mil personas se habían marchado de sus hogares en Darfur por temor a los nuevos enfrentamientos entre los rebeldes y las fuerzas gubernamentales de ese país.