Sindicatos de la educación pública de Panamá protagonizan este viernes un paro nacional de 24 horas, para reclamar que el anunciado aumento salarial no esté condicionado a una evaluación de las escuelas, así como también para rechazar la “actitud negativa del Ministerio de Educación” ante sus demandas y reivindicaciones.

La dirigente de la Asociación de Educadores de Veraguas, Yadira Pino, indicó que el paro es nacional, y justificó la medida con la falta de respuesta al pliego de peticiones que fue entregado en la Presidencia de la República, tras la marcha de hace un par de semanas.

Asimismo, reiteró como demanda que el primer pago de un plus de 300 dólares se realice en la primera quincena de abril, y se desembolse como aumento de salario base de los docentes, y no como un bono, tal como pretende la ministra del área, Lucy Molinar.

Por su parte, el secretario general del Frente Nacional de Educadores Independientes, Luis López, comunicó hace unos días que la medida fue tomada luego de la falta de respuestas por parte del Gobierno de Ricardo Martinelli.

Igualmente, López aseguró que los gremios "han sido ignorados" en sus intentos de llegar a un acuerdo y "no han recibido respuesta alguna", ni de la Ministra ni del Presidente.

En vista de la situación, el gremio educativo tiene previsto celebrar una reunión el día sábado para decidir si la huelga será con carácter indefinida.

Ante ello, la ministra Molinar rechazó la decisión de los docentes y amenazó con “sancionar a quienes no acudan a las aulas”, pues el paro no está autorizado por el Ejecutivo y, por lo tanto, “este viernes es un día normal de clases”.

Los maestros panameños han manifestado reiteradamente su rechazo a que un aumento salarial esté condicionado a un plan de autoevaluaciones. Los docentes han explicado que "no están en contra de las evaluaciones", siempre y cuando no sean una condición para recibir el incremento salarial.

La huelga convocada para este viernes incluye la participación y el apoyo de al menos 15 organizaciones sindicales de maestros del país centroamericano.

A finales del febrero, el Gobierno panameño anunció un plan de autoevaluación y mejoras de los centros educativos públicos, que incluye un aumento escalonado del salario de los maestros, previo a un proceso de evaluación de los centros educativos.