Varias provincias del sur de Tailandia permanecen este sábado sin estar listas para las elecciones anticipadas de este domingo que se desarrollarán bajo fuertes medidas de seguridad, por los pronósticos de estallidos de violencia.

Al menos en tres de esos territorios sureños continúa la campaña de bloqueo de los colegios electorales emprendida por el antigubernamental Comité de Reforma Democrática Popular. El movimiento opositor mantiene el pulso de las manifestaciones, sin embargo, en algunos lugares ha enfrentado protestas de ciudadanos que están dispuestos a ejercer el derecho al sufragio.

La Comisión Electoral informó que en esas localidades se ha visto impedida de distribuir en los recintos de escrutinio la lista de partidos a elegir, por lo que en el mejor de los casos sólo votarán por los candidatos de circusncripciones, quebrantando lo estipulado por ley.

El presidente del órgano arbitral, Supachai Somcharoen, dijo que continuaba negociando para evitar el uso de la fuerza y pérdidas de vidas ante el fracaso del comandante de la Cuarta región militar, general Sakol Cheuntrakul en controlar las protestas de opositores.

Por su parte, el ministro de trabajo Chalerm Yoobamrung, al frente del Centro para Mantenimiento de la Paz y el Orden, advirtió al Partido Democrático que tendrá que responsabilizarse con los previsibles choques violentos en la jornada dominical.

Con similares amenazas la capital, Bangkok, se prepara para unos comicios en condiciones de estado de emergencia y bajo la protección de policías, soldados y unidades de respuesta rápida en un despliegue sin precedente en consultas ciudadanas.

Se anticipa que a diferencia de anteriores contiendas, no se conocerá el conteo total horas después del cierre de las urnas ya que se da como probable reconvocar para el 23 de febrero a colegios electorales impedidos de funcionar, y solo con posterioridad se dispondrá de un cómputo definitivo.