El Ministerio de Exteriores de Rusia emitió este viernes un comunicado en el que asegura que el Parlamento venezolano está controlado por "un ala radical del campo antigubernamental" que ha provocado el aumento de la "retórica agresiva" y se encaminan hacia la "desobediencia civil".

El documento indica que por el momento "se está llevando a cabo la preparación de manifestaciones planeadas los próximos días" que pueden provocar, (o que "están orquestadas de esa manera"), enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, dejar víctimas y sembrar violencia.

"Las acciones violentas no solucionan los problemas y solo conducirán a una mayor división de la sociedad, a más intolerancia, a confrontaciones violentas y a la desestabilización de la situación en la región", precisa el documento. 

El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso indicó que "los provocadores tienen que entender que no van a lograr apoyo", pues esto "contradice las decisiones a favor de la legitimidad y orden constitucionales adoptados por todos los Estados del hemisferio oeste".

El Gobierno de Venezuela ratificó el pasado 19 de enero su disposición de dialogar con la oposición como única vía para solucionar los problemas que se presentan en el país y consolidar la paz, declaró el representante gubernamental en la mesa de diálogo, Jorge Rodríguez.

"El único camino es el diálogo constructivo, fructífero", afirmó Rodríguez desde el Palacio Presidencial de Miraflores, en Caracas, donde se llevó a cabo una reunión con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, el secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper y representantes de las mesas de negociaciones.

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