Los terroristas del Estado Islámico (EI) entregaron unas 300 mujeres yazidíes que habían capturado recientemente en Irak a sus combatientes en Siria a cambio de dinero, luego de considerarlas como "botín de la guerra contra los herejes".

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) informó este sábado que el EI "vendió" por mil dólares a cada una de estas mujeres entre los terroristas que se encuentran al norte de Siria.

Los yihadistas exigen que las yazidíes se conviertan primero al islam y luego se casen con los militantes a los que fueron vendidas.

El OSDH señaló el caso de al menos 27 de estas mujeres que ya fueron obligadas a casarse con integrantes del EI en la periferia de la provincia de Alepo y en las ciudades de Raqa y Hasaka, en el norte de Siria.

Sin embargo, ciudadanos kurdos intentaron sin éxito pagar una cifra mucho mayor de dinero al EI a cambio de la liberación de estas mujeres en la zona de Al Shadadi, en Al Hasaka, añadió el grupo de derechos humanos.

Decenas de miles de personas de la minoría kurda yazidí han huido de sus hogares en el norte de Irak perseguidos por el Estado Islámico, situación que ha creado una crisis humanitaria.

Terrorismo financiado por Occidente

Ua fuente citada por HispanTV, que pidió permanecer en el anonimato, indicó que EI aplica una nueva política que consiste en la venta de los cuerpos de sus víctimas a cambio de grandes cantidades de dinero y muchas familias han pagado a los cabecillas del grupo terrorista a través de intermediarios locales.

Los miembros del EI -que gozan del respaldo de algunos países como Estados Unidos- están cometiendo diversos actos criminales tanto en Siria como en Irak, incluidas ejecuciones sumarias y secuestros masivos, venta de mujeres y cuerpos de personas asesinadas.