El canciller venezolano Jorge Arreaza denunció este jueves las consecuencias que ha traído el bloqueo económico y comercial, impuesto por el Gobierno de EE.UU. hacia su país.

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Durante una alocución realizada en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Arreaza ofreció cifras y evidencias de cómo las sanciones y agresiones imperiales derivadas de este bloqueo, repercutían en el pueblo venezolano.

Según denuncian constantemente las autoridades de Venezuela, contra el país existe un "bloqueo diplomático, mediático, económico y comercial" que incide en la calidad de vida de los venezolanos y que se evidencia en las agresiones de entes imperiales internacionales.

Actividades restringidas

Desde 2017, las ordenes ejecutivas aplicadas por el mandatario de EE.UU., Donald Trump contra todos los rubros de la economía venezolana han establecido un cerco internacional que afecta la calidad de vida de los venezolanos.

Inicialmente, las sanciones aplicadas contra la industria petrolera con la orden 13.808 (emitida en 2017), en las que se bloqueó la emisión de nuevos títulos de deuda de la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa) han significado un claro perjuicio a los intereses del pueblo de Venezuela. 

Esto se afianzaría posteriormente con la Orden Ejecutiva 13.827, en la que se prohibió en marzo de 2018 a toda persona o entidad estadounidense transar con cualquier moneda digital venezolana, buscando atacar directamente a la criptomoneda Petro para erosionar las bases del Estado venezolano.

Recientemente, los últimos ataques se han trasladado hacia la Compañía General de Minería Venezolana (Minerven) y el ente rector de las finanzas en el país suramericano, el Banco Central de Venezuela (BCV).

Ofensiva financiera

Con las sanciones, el sistema financiero internacional limitó el accionar de múltiples instituciones nacionales (públicas y privadas) para ejecutar pagos a proveedores, recibir pagos, y esencialmente cumplir con obligaciones financieras como la cancelación de títulos y bonos de la deuda pública, así como acceder a fuentes de financiamientos internacionales.

Estas agresiones han logrado afectar el patrimonio venezolano, al producirse un cerco financiero contra la nación suramericana con el cierre unilateral de contratos de corresponsalía bancaria, así como la limitación de las operaciones en bancos internacionales dentro y fuera de EE.UU. 

Esta situación ha obligado a utilizar otras monedas de mercados emergentes (liras turcas, yuanes), lo que se ha traducido en mayores costos transaccionales y perdidas de valor que deben ser asumidos por el Gobierno de Venezuela.

Asimismo, el bloqueo de activos financieros, capital, filiales y empresas asociadas a estatales venezolanas, han generado la ilegal apropiación de recursos, que ascienden a más de cuatro mil millones de dólares, hecho que fue denunciado por el canciller Arreaza en la ONU.

Generación de pérdidas

Las amenazas en el ámbito monetario financiero se evidencian en las pérdidas financieras producto de la caída en el valor de mercado de los títulos valores emitidos por Venezuela y la imposibilidad de movilizarlos, por lo que el balance negativo asciende a los 1.429 millones de dólares aproximadamente.

A su vez, las pérdidas financieras producto de las variaciones cambiarias respecto al dólar estadounidense representan una significativa perdida de cientos de millones de dólares.  

De igual forma, el incremento de costos por comisiones bancarias en los bancos que siguen manteniendo relación con instituciones venezolanas, que han incrementado significativamente las comisiones bancarias por ejecución de operaciones, aumentando el valor de los recursos disponibles para la promoción de los planes de desarrollo nacional en Venezuela. 

También los procesos de importación se han visto afectados, ya que el bloqueo financiero ha elevado las dificultades para el arribo de buques con cargamentos de alimentos y materia prima necesaria para la producción en Venezuela.Esto dificulta la adquisición de alimentos, y los costos asociados ascienden a más de 300 millones de dólares.

En este sentido, Venezuela ha sido víctima de este negocio del bloqueo financiero, el cual ha generado pérdidas y bloqueos de fondos que superan los cinco mil millones de dolares y que limitan y repercuten en el bienestar de la población de este país.