La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) informó este miércoles sobre la inscripción de 64 nuevas colecciones documentales en el Registro Memoria del Mundo, por lo que se eleva el número a 494 producciones inscritas.

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Feminismo, ciencia y política-El legado de Bertha Lutz (Brasil), la colección de carteles de cine cubano, los archivos fotográficos del diario El Popular (Uruguay), los negativos sobre placa de vidrio (Perú) y el Registro de identificación de esclavos en las antiguas colonias francesas (Haití y Francia) figuran entre los 64 nuevos elementos incorporados en la 216 Sesión del Consejo Ejecutivo.

De igual manera, dieciséis manuscritos del escritor ruso Fiódor Mijáilovich Dostoyevski se han presentado para la consideración del Comité del Programa Memoria del Mundo de la organización.

En el caso de la producción documental sobre Bertha Lutz (1894-1976) se resalta no solo que fue bióloga, congresista, sino también feminista brasileña, y una de las fundadoras de la Federación Brasileña para el Progreso de la Mujer.

“Los Archivos de la Revolución del 19 de abril se refieren a una extensa colección de materiales documentales sobre el movimiento prodemocracia iniciado por estudiantes que estalló en la primavera de 1960 en la República de Corea”, y se encuentran en estas nuevas colecciones.

Para la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, “el patrimonio documental es la memoria común de la humanidad. Debe protegerse con fines de investigación y compartirse con el mayor número posible de personas. Es una parte fundamental de nuestra historia colectiva".

Para la Unesco, este proyecto evita la pérdida del patrimonio documental: documentos o colecciones de documentos de valor significativo, perdurable, ya sea en papel, audiovisuales, digitales o en cualquier otro formato.

“Conservado en materiales tan diversos como la piedra, el celuloide, el pergamino o los discos de metal, este patrimonio emblemático de valor universal se preserva ahora para las generaciones futuras, como los manuscritos persas ilustrados e iluminados, los archivos arquitectónicos de Oscar Niemeyer o los manuscritos del Cuento de Panji”, puntualizó la Unesco.