El Servicio de Cambio Climático (C3S) de Copernicus, componente de vigilancia del clima del programa espacial europeo, declaró el lunes a marzo como décimo mes consecutivo más cálido a nivel mundial desde que existen registros.

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Según el boletín mensual de la institución con sede en Alemania, fue 1.68 ºC más cálido que la media estimada para el mes y temperatura media del aire en superficie de 14.14 º C, 0.73 º C por encima de la media de 1991-2020 para ese mes y 0.10 º C por encima de la temperatura de marzo de 2016, que ostentaba el récord de temperatura del tercer mes del año.

Fuera del continente europeo las temperaturas del mes de marzo superaron la media en el este de América del Norte, Groenlandia, Rusia oriental, Centroamérica, parte de Sudamérica, así como en diversas zonas de África, el sur de Australia y algunos puntos de la Antártida.

Europa central y oriental fueron las regiones donde las temperaturas fueron superiores a la media.

Si bien las temperaturas del aire marino se mantuvieron en líneas generales en un nivel inusualmente elevado, el fenómeno de El Niño continuó debilitándose al este del Pacífico ecuatorial, manteniendo la temperatura media mundial de la superficie del mar en las coordenadas 60°S-60°N los 21.07 ºC, el valor mensual más alto.

Samantha Burgess, directora adjunta del Servicio de Cambio Climático de Copernicus, subrayó en un comunicado que “marzo continúa la secuencia de récords climáticos derribados tanto en la temperatura del aire como en las temperaturas de la superficie del océano, convirtiéndose en el décimo mes consecutivo con registro récord”.

“La temperatura media mundial es la más elevada desde que hay registros, situándose en los últimos doce meses 1.58 º C por encima de los niveles preindustriales. Para frenar el calentamiento es necesario reducir rápidamente las emisiones de gases de efecto invernadero”, resaltó.

Asimismo, en el tercer mes del año, la extensión del hielo marino del Ártico alcanzó su máximo anual, marcando la mayor extensión para un mes de marzo desde 2013, aunque fue un 20 por ciento inferior a la media de marzo, se convirtió en la sexta extensión más baja para ese mes en el registro.

Según especialistas, esto no es más que la continuación de una serie de anomalías climáticas negativas que se observan desde 2017.  Al igual que en febrero, fue en el norte del mar de Weddell y en el sector del mar de Ross-Amundsen donde las concentraciones de hielo marino fueron en su mayor parte inferiores a la media.