El incendio este martes de tres aulas ubicadas en casetas de paja en una escuela de la región de Maradi, al sur de Níger, dejó un saldo de al menos 25 niños fallecidos y otros 80 con heridas de gravedad.

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Las víctimas de la escuela conocida como AFN son menores de entre tres y ocho años. Las fatales quedaron atrapadas en el incendio, en tanto que las heridas fueron evacuadas a centros sanitarios.

Según reportes de prensa, todavía no hay ningún informe conclusivo de la tragedia, ya que los padres y las autoridades siguen buscando otras víctimas.

El gobernador local, Chaibou Aboubacar, declaró a medios de prensa que hasta este momento se desconoce la causa del incendio, pero las precarias condiciones de las aulas determinaron tragedias similares ocurridas con anterioridad.

El pasado año murieron 20 niños en otro incendio similar en Niamey, la capital de Níger, tras lo cual las autoridades anunciaron un amplio programa de construcción de infraestructuras escolares para acabar con las aulas improvisadas en cabañas muy inflamables.

El representante del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en Níger, Stefano Savi, tras el incendio señaló en una declaración: "Ningún niño debería estar nunca en peligro cuando aprende en la escuela. Unicef seguirá trabajando con las autoridades nacionales y los socios en todo el país para garantizar que los niños puedan asistir a la escuela y aprender en entornos seguros".

Aboubacar también declaró a los medios que en Maradi se guardará luto durante tres días a partir de este martes.