La Organización de las Naciones unidas (ONU) liberó un millón de dólares para solventar los servicios de sanidad y atención en la Franja de Gaza, en aras de evitar la interrupción de la ayuda humanitaria en el territorio árabe. 

El coordinador humanitario de Naciones Unidas, Jamie McGoldrick, afirmó que el dinero será utilizado por el fondo Programa de Combustible de Emergencia Asistido por la ONU para mantener las máquinas generadoras de electricidad para evitar el colapso de los servicios básicos. 

"Esta liberación de fondos es fundamental para evitar un colapso total de los servicios y un posible brote de enfermedades", explicó McGoldrick por medio de un comunicado emitido por la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).  

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La asignación de los recursos monetarios permitirá que más de 250 instalaciones (bombas de agua, plantas de electricidad, equipos de hospitalización) reciban suministro eléctrico y continúen en funcionamiento ante la crisis que ha generado el bloqueo de gasolina israelí contra Gaza. 

La ONU advirtió que pese a la liberación, aún se necesitan unos dos millones de dólares antes de diciembre de 2018 para garantizar el funcionamiento de los centros de salud, luz y agua. 

Actualmente Gaza necesita más de 60.000 litros de combustible para el normal funcionamiento de los servicios básicos de más de 1,8 millones civiles, los cuales se han visto afectados por la crisis médica y sanitaria que enfrenta la región ante el asedio israelí, situación que la ONU ha denunciado desde 2014.

La negación de los derechos palestinos y el bloqueo de combustible en diferentes períodos (entre 2017-2018) ha provocado la agudización de la crisis humanitaria.  

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