La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos presentó el jueves un informe que demuestra las violaciones de los derechos humanos durante las protestas antigubernamentales en Perú cuando la policía empleó fuerza letal contra manifestantes pacíficos.

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El ente internacional resaltó que las protestas sociales contra la presidenta peruana Dina Boluarte, entre diciembre de 2022 y marzo de 2023, "se desarrollaron de forma pacífica, aunque algunos manifestantes y otras personas protagonizaron actos de violencia generalizada alimentados por grupos extremistas".

En el documento, de 54 páginas, también se criticó los "estereotipos discriminatorios o racistas" en contra de los manifestantes, de los que fallecieron 67 y miles resultaron heridos, la mayoría en enfrentamientos con las fuerzas policiales antidisturbios.

"En los casos documentados, las personas funcionarias encargadas de hacer cumplir la ley hicieron uso de la fuerza, incluida la fuerza letal con armas de fuego, fuera de las circunstancias que serían permitidas por las normas internacionales de derechos humanos, lo que equivaldría a una privación arbitraria de la vida", apuntó la ONU.

Como colofón, la Oficina de Derechos Humanos extendió un grupo de recomendaciones al gobierno peruano que debe "garantizar que no se utilicen armas de fuego en el contexto del control de multitudes durante las protestas sociales" y "abordar eficazmente los estereotipos discriminatorios o racistas" que se emplearon en contra de manifestantes.