Uganda celebrará el próximo 18 de febrero elecciones generales en medio de un clima de tensión y violencia electoral. El pasado lunes 15, la policía detuvo en la capital del país, Kampala, al principal candidato de la oposición, Kizza Besigye.
El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, aspira a continuar en el poder tras 30 años, para ello se lanzó a una quinta campaña consecutiva, A la edad de 71 años, es uno de los líderes más veteranos de África, y se admitía poca oposición a su Gobierno.
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El principal candidato de la oposición, Kizza Besigye, del foro para el Cambio Democrático, se encuentra ante su mejor oportunidad para imponerse en las urnas, en casi dos décadas, tras perder en las elecciones de 2001, 2006 y 2011.
A días de las elecciones, la violencia en el país se ha incrementado por las acciones de represión del Gobierno contra los candidatos de la oposición y la presencia de militantes de Interahamwe, organización paramilitar hutu, que se formó justo antes del genocidio en Ruanda en las fuerzas de seguridad del país.
A pesar de los llamamientos para que el gobierno le ponga un freno a los grupos paramilitares, el Gobierno de Museveni ha desoído las recomendaciones de los partidos y de organismos de derechos humanos presentes en Uganda.
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Los recientes encarcelamientos de dos de los principales candidatos, Kizza Besigye y Amama Mbabazi, han contribuido a incrementar la violencia en el país. Las elecciones del próximo 18 de febrero son las más cerradas de los últimos años.